El Gobierno de Pedro Sánchez anunció este jueves la rebaja del IVA para los consumidores de gas, de modo que se varía del 21% al 5%. Esta medida podría generar expectativas positivas entre aquellos que consumen grandes cantidades de gas, como la industria de cerámica de Castellón, que en un año y medio ha pasado de pagar 20 euros por megavatio/hora a alcanzar los 300.

En el caso de compañías como Azuliber, que se dedican a la producción de arcilla atomizada para el sector azulejero, anunciaron esta semana que no aguantaban la incertidumbre regulatoria que rodea a las plantas de cogeneración. Esta situación se da desde que se aprobó el tope del gas para la electricidad, por lo que las retribuciones que percibían estas plantas eran muy inferiores a los precios del gas, que sobrepasaban los 300 euros, lo que daba lugar a las empresas a tener pérdidas. La consecuencia era el cese de su actividad y un ERTE para 117 empleados.

Esta situación se lleva advirtiendo desde hace meses. La patronal cerámica (Ascer), alcaldes de municipios que concentran a esta industria, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig; y el propio presidente de Pamesa, Fernando Roig, remitieron cartas al Ministerio de Transición Ecológica --responsable de la política energética-- para exigir una solución rápida y efectiva a este problema. Sin obtener ninguna respuesta.

El anuncio de Sánchez "tendrá un escaso impacto en el plano empresarial dado que el IVA es un impuesto que se compensa", explicó el secretario general de la patronal cerámica (Ascer).

La razón está en que los fabricantes tienen que pagar cada vez más dinero por el IVA del gas, pero luego este dinero se devuelve, ya que este concepto lo asume el consumidor del producto final. Lo que significa que no tiene ningún efecto en la cuenta de resultados de unas empresas que ya están aplicando expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por las pérdidas que generan sus costes energéticos. El sector sigue teniendo los mismos problemas para garantizar su futuro ante este panorama tan adverso, y sigue a la espera de que las administraciones tomen medidas de alivio.

Ascer recordó que la rebaja del IVA para el gas natural, "es algo que habíamos incluido dentro de nuestra batería de propuestas y que ya se había aplicado un marco similar en el caso de la electricidad", pero que no formaba parte del núcleo duro de reivindicaciones, entre las que se incluía la eliminación del impuesto de hidrocarburos, la reducción de los peajes de gas o una intervención temporal de los precios energéticos. Las gasolinas tienen desde hace meses el descuento de 20 céntimos, pero no se han aplicado actuaciones similares en el gas.

Por su parte, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, expuso este viernes en Italia la preocupación que vive este sector, cuya producción se concentra en la provincia de Castellón, ante una crisis energética caracterizada por el continuo encarecimiento de los precios del gas y la electricidad.

Durante el encuentro, celebrado en el marco de la asamblea general de la Ruta Europea de la Cerámica, junto con el presidente de la patronal azulejera italiana (Confindustria Ceramina), Giovanni Savorani; y la presidenta del Foro de la Cerámica del Parlamento Europeo, Elisabetta Gualmini; se pusieron en común las problemáticas que atraviesa este sector tanto en Italia como en España ante el encarecimiento de los costes, aprovechar sinergias y hacer un frente común en Bruselas. La alcaldesa señaló que mantendrá próximamente un encuentro con representantes del sector cerámico de Castellón para abordar la complicada encrucijada actual.