Antes de la crisis económica de 2008, aquella que pinchó la burbuja inmobiliaria, ser ingeniero o arquitecto era sinónimo de bonanza y éxito casi asegurado en el mundo profesional. Aunque eso cambió radicalmente desde el fatídico año de Lehman Brothers, el gatillo de la recesión. Trabajadores y compañías relacionadas con la construcción de obras públicas y servicios han tenido que preparar maletas y salir al exterior para sostener negocios y empezar nuevas aventuras empresariales. Ahora, con la recesión derivada de la pandemia de coronavirus, se acentúa también esa estrategia. Es el caso de Vielca, empresa valenciana de servicios de ingeniería y arquitectura, una de las líderes en España, que cumple tres décadas de actividad y ya genera el 60 % de la facturación desde sus delegaciones en El Salvador, Nicaragua y Honduras (donde acaba de abrir sede). En 2021 inaugurará otra en Panamá.

Sin duda, hacer las Américas consolida el negocio de estas firmas y dibuja el futuro de la mercantil puesta en marcha por Vicente Candela, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. En un sector tan atomizado, donde la citadas crisis han arrasado gran parte de las compañías, "solo las empresas que se han reinventado y las más internacionalizadas han podido superar la debacle de 2008 y ahora, la de la covid-19. En España apenas hay demanda de grandes proyectos de obra civil y el negocio está arrasado en el mercado doméstico", apunta el fundador y propietario de Vielca. Puesta en marcha en marzo de 1990, sus potenciales clientes se centraban únicamente en las administraciones públicas de esta autonomía. Ha sido una de las pocas que superó la fatídica crisis financiera, pues de las treinta empresas que había se ha quedado una docena.

"Nos hemos salvado de la crisis de la covid por tener delegaciones permanentes en cada país en el que operamos. Directamente licitamos desde esas plazas, sin necesidad de desplazar ingenieros al lugar. Además, para diversificar nuestra actividad, invertimos cada vez más recursos en investigación, diseño e innovación", explica Candela desde su cuartel general y rodeado del equipo directivo. La empresa emplea a 90 profesionales en València y 110, en el exterior. Ha cerrado su último ejercicio con una facturación de 7 millones de euros, cifra que prevé superar en un 10% durante 2021. El coronavirus frena, al menos de momento, la apertura de una sede en China. Una mercantil de servicios de ingeniería y arquitectura necesita "capacidad de diversificación, adaptación al terreno y puestos de trabajo multidisciplinares", cuenta su principal timonel. Por eso Vielca maneja casi 200 proyectos cada año entre estudios, informes y trabajos de supervisión de obras.

El 90% de la facturación de Vielca procede de las administraciones públicas, donde no es fácil desenvolverse. "Ganar concursos públicos resulta más fácil en países de América que en algunas autonomías españolas", puntualiza Candela . "Con el transcurso del tiempo e invirtiendo mucho esfuerzo y dedicación se ha conseguido mantener un crecimiento continuado a pesar de los ciclos de inversión pública, lo que nos ha permitido situarnos, en varios campos, entre las ingenierías más competentes del mercado nacional", explica el principal ejecutivo de la compañía.

Uno de los trabajos emblemáticos en el terreno del medio ambiente acometidos por Vielca es el inventario de todos los bosques de El Salvador, donde participaron cuadrillas de campo formadas por unas 90 personas para describir y clasificar toda la masa vegetal con vistas a realizar planes de protección, desarrollo y explotación. Ha analizado una superficie de 800.000 hectáreas, que supone el 38% de todo el país. Y medido más de 25.000 árboles. Fue todo un éxito y a raíz de ese trabajo se le han abierto nuevos horizontes en centroamérica. Así las cosas, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI por sus siglas en inglés ), con sede Washington, se ha fijado en Vielca para revitalizar todos los bosques del Caribe. Así, ha recibido el encargo del monitoreo de más bosques en aquellos países. "Somos la única empresa española que es 'partner' tecnológico de esta asociación que cada año maneja inversiones privadas de 2.400 millones de euros", explica Candela.

Más allá de los bosques, el grupo de servicios desarrolla herramientas informáticas basadas en la realidad aumentada y la tecnología BIM ( Modelado de Información en Construcción) para la remodelación de 32 estaciones de metro de FGV (Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana). También es capaz de desarrollar software que sistematiza datos de estaciones meteorológicas y proyecta todo tipo de obras hidráulicas. Y no para de ganar contratos en India, Bangladesh, Marruecos, Guinea Ecuatorial, Canadá, Venezuela, Perú , El Salvador... Y es que, "España es poco rentable", concluye el líder de Vielca, quien añade que "la caída de la inversión pública reduce el número de empresas. La ingeniería del asfalto y el hormigón tiene poco futuro en España".