La vacuna contra la COVID-19 permite a los empresarios ver "el final del túnel" y "elimina escenarios económicos muy negativos", según el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, que aún así llama a la prudencia porque los efectos de la vacuna "tardarán" un tiempo en llegar a la economía.

Hernández de Cos ha participado este viernes en Barcelona en el XXV Encuentro de Economía de S'Agaró, donde todos los participantes han considerado muy positiva la próxima llegada al mercado de una vacuna contra el coronavirus.

En este sentido, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha asegurado que España, en el marco de la estrategia europea, comprará más vacunas de la COVID de las que necesita para "ir sobre seguro" y que la previsión es que a principios de año se puedan administrar las primeras dosis.

El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, ha dicho que este anuncio "permite ver luz al final del túnel" y aporta esperanza, lo que es fundamental para la economía, pese a que aún quedan meses "durísimos por delante".

"El ánimo, la esperanza, es fundamental. Ahora tenemos esperanza y eso lo veo importantísimo porque renace el optimismo, aunque vienen meses durísimos", ha manifestado Bonet.

En esta misma línea se ha expresado el gobernador del Banco de España, que ha dicho que "la realidad es que esos efectos positivos (de la vacuna), más allá de confianza, van a tardar en trasladarse a la actividad económica", teniendo en cuenta que ahora estamos en plena segunda ola de la pandemia.

"Es una noticia muy positiva que creo que puede tener un efecto muy importante en la confianza de inversores y consumidores y sobre la actividad económica. Pero querría ser prudente, porque en el corto plazo las restricciones en Europa se van a seguir manteniendo", ha declarado.

De hecho, Hernández de Cos ha avanzado que el consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE), que se reunirá en diciembre, "casi con toda seguridad" revisará a la baja las perspectivas de crecimiento y de inflación para España en 2020.

El gobernador del Banco de España ha llamado a "evitar a toda costa" que la crisis sanitaria que ha provocado esta crisis económica "se convierta en crisis bancaria", y ha desaconsejado por el momento a los bancos el abono de dividendos en esta coyuntura.

En su intervención, Pablo Hernández de Cos también ha enfatizado el papel que ha tenido Europa en esta crisis, que a diferencia de las anteriores ha provocado una "perturbación" mundial, y ha aplaudido su capacidad de reacción, impulsando medidas de forma coordinada en ámbitos como la política monetaria o la política microprudencial para proporcionar certidumbre.

Esta crisis, no obstante, según el Gobernador, ha puesto en evidencia que la gobernanza de la UE sigue teniendo importantes carencias, pues seguimos sin tener un mecanismo de estabilización macroeconómica fiscal permanente y necesitamos dotarnos de un marco fiscal más sencillo.

El impacto de la crisis del coronavirus en el turismo ha sido otro de los temas de debate de esta primera jornada de S'Agaró.

El presidente de la Cámara de España ha aprovechado el encuentro para reclamar al Gobierno que "eche el resto" y "acentúe" su apoyo al turismo, un sector "nuclear" en la economía española que ha recibido el máximo impacto de la crisis y que es vital para impulsar el crecimiento del país.

"El Estado debe echar el resto en esto. Tiene que acentuarse el gasto ahí, creo que esto hay que reorientarlo", ha señalado Bonet, que considera que "se gasta en cosas que realmente no son absolutamente necesarias y cosas que sí lo son tienen poca ayuda".

Por su parte, el presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, ha propuesto que los test que España exigirá a partir del próximo 23 de noviembre a los viajeros procedentes de países de riesgo sean de antígenos, ya que son "bastante fiables" y más rápidos que las pruebas PCR.

La última mesa redonda de la jornada la han protagonizado Garamendi y los líderes de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, quienes han pedido a la clase política "responsabilidad" y "sentido de Estado" ante la actual crisis generada por la COVID-19 y han destacado la actitud conciliadora que han demostrado los agentes sociales en esta coyuntura.