Las aerolíneas europeas perderán ingresos por valor de 89.000 millones de dólares (82.000 millones de euros) debido al COVID-19, y Reino Unido, España y Alemania serán los países más afectados, analizó hoy un nuevo informe de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).

El informe aumenta un 17 % las previsiones de pérdidas que la organización publicó hace un mes, y subraya que 6,7 millones de empleos vinculados al transporte aéreo en el Viejo Continente están en riesgo (1,1 millones más que en el cálculo de marzo).

Las nuevas cifras, que tienen en cuenta un escenario de tres meses de restricciones al transporte aéreo seguidos de un levantamiento gradual de esas medidas, causarían un impacto negativo de 452.000 millones de dólares (419.000 millones de euros) en el producto interior bruto (PIB) europeo, según la IATA.

"En un momento en el que las aerolíneas afrontan una crisis de liquidez sin precedentes, necesitamos desesperadamente apoyo financiero de los gobiernos europeos, y apoyo regulatorio", comentó al presentar las cifras el vicepresidente regional de la IATA para Europa, Rafael Schvartzman.

Reino Unido sería uno de los mercados más afectados por la actual crisis en el sector aéreo, con 140 millones de pasajeros menos y pérdidas de ingresos de 26.100 millones de dólares (25.000 millones de euros), lo que pone en riesgo 661.200 empleos en ese país, de acuerdo con el informe.

España perdería 114 millones de pasajeros e ingresos por 15.500 millones de dólares (14.300 millones de euros), pero sería el país del continente con más empleos relacionados con la aviación en peligro, 901.300, siempre según la IATA.

Alemania, Italia y Francia serían otros países gravemente afectados, con pérdidas de ingresos que oscilarían entre los 11.500 y los 17.900 millones de dólares (10.600-16.500 millones de euros), que ponen en riesgo 310.000 puestos de trabajo en el mercado italiano, 392.000 en el francés y 483.000 en el alemán.

"Cada empleo creado en el sector da apoyo a otros 24 en la economía general", recordó Schvartzman, mientras que el informe de la IATA consideró esencial que los gobiernos actúen con rapidez para minimizar el daño económico que ha supuesto la reducción de un 90 % en el tráfico aéreo durante los peores meses de la pandemia.

Apoyo financiero directo, préstamos y alivios de deuda, así como una flexibilización temporal de las regulaciones (por ejemplo en las indemnizaciones por cancelación de vuelos) son algunas de las recetas que la IATA sugiere a Europa para hacer frente a la crisis aérea