Los máximos ejecutivos españoles no temen que la irrupción de los robots en el mundo laboral suponga la eliminación de muchos puestos de trabajo. Al contrario: prevén que generará más empleo. Así lo recoge el informe titulado Crecer con esfuerzo, que ha elaborado KPMG. El estudio indica que el 68% de los consejeros delegados de España pronostica que tanto la automatización (o RPA) como la inteligencia artificial crearán más puestos de trabajo de los que destruya en los próximos tres años.

Es la misma previsión que maneja el 62% de los 1.300 CEO de las principales compañías del mundo analizadas por el estudio, que también ha incluido las opiniones de los ejecutivos de 50 grandes empresas españolas.

Esta nueva realidad implica un nuevo desafío, como sostiene el presidente de KPMG en España, Hilario Albarracín: «El reto es gestionar la formación y reconversión de los profesionales para el futuro; un futuro en el que los profesionales convivirán con las máquinas como compañeros de trabajo»; asegura, en palabras citadas en una nota de prensa.

El informe aborda además las oportunidades que conlleva la transformación digital. La mayoría de los ejecutivos (casi el 100%) ve en la disrupción tecnológica una oportunidad más que una amenaza. El 60% de los CEO asegura que «se siente preparado para liderar una transformación radical de la organización», pero, eso sí, admite que «necesitan mejorar la monitorización de la disrupción tecnológica». En nuestro país, el 52% de los directivos ha empezado pequeños proyectos-piloto de inteligencia artificial y un 46% la está poniendo en marcha de forma limitada.

Optimistas con la economía

La economía mejorará, auguran los ejecutivos sobre el panorama macroeconómico. El 56% de los CEO españoles (55% mundiales) confía en que haya un crecimiento anual de los ingresos de hasta el 2% en los próximos tres años, a pesar de que «el entorno es muy complejo», como señala Albarracín, ya que «la incertidumbre geopolítica, la disrupción y las ciberamenazas se han convertido en la nueva normalidad».

La confianza de los directivos en su país obtiene niveles más moderados en países como Reino Unido, Italia, Alemania y España, debido «a la huella que han dejado los procesos de incertidumbre política que han vivido estos países en los últimos 18 meses».

Un perfil: el científico de datos

Los directivos se muestran cautos con el crecimiento de las plantillas. En España la moderación es menor, dicen, por las necesidades de atraer «nuevos profesionales y habilidades ligadas a la transformación digital». El 56% de los consejeros delegados españoles espera incrementar su plantilla «en los próximos tres años en una horquilla del 6-10%». El perfil que creen más relevante para el futuro es el de científicos de datos.

¿Y cuáles son los riesgos a los que se enfrentan? A su juicio, los riesgos climáticos y medioambientales son el segundo problema que más preocupa, tras los riesgos geopolíticos. También generan inquietud los riesgos de tecnologías disruptivas y emergentes, el riesgo reputacional y el riesgo de ciberseguridad.

De hecho, el 32% de los CEO españoles (49% globales) afirma que los ciberataques son inevitables y únicamente el 44% de los españoles se declara preparado para afrontar un ciberataque.