China ha informado este viernes de que planea imponer aranceles de hasta 3.000 millones de dólares (alrededor de 2.400 millones de euros) sobre las importaciones estadounidenses en respuesta a los aranceles impuestos por Estados Unidos sobre los productos de aluminio y acero chinos.

China estaba considerando un arancel de 15 por ciento para los productos estadounidenses, incluyendo fruta seca, vino y tubos de acero, y uno de 25 por ciento para los productos de cerdo y aluminio reciclado, según ha informado el Ministerio de Comercio chino en un comunicado.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves el memorándum "centrado en la agresión económica de China" que permitirá imponer aranceles a una serie de productos procedentes del gigante asiático, que se concederán en un plazo de 15 días y cuyo alcance podría llegar a suponer unos 60.000 millones de dólares.

El Ministerio de Comercio chino ha informado de que las medidas se implementarían en dos etapas: primero, el arancel del 15 por ciento a 120 productos, incluidos tubos de acero y vino por valor de 791 millones de euros, y más tarde el arancel superior del 25 por ciento sobre el cerdo y el aluminio por valor de 1613 millones de euros.

"China no teme en absoluto una guerra comercial", advirtió el ministro chino de Comercio. "Si se inicia una guerra comercial, China luchará hasta el fin para defender sus intereses legítimos con todas las medidas necesarias", había apuntado el jueves la embajada china en Washington.

La administración Trump decidió jugar la carta de la moderación con varios de sus principales aliados en este caso, incluyendo a la Unión Europea, Australia y Corea del Sur, al anunciar el jueves por la noche la suspensión, hasta el 1 de mayo de 2018, de esos aranceles al acero y el aluminio, promulgados el 8 de marzo.