El Banco Central Europeo (BCE) mantuvo hoy sus pronósticos de crecimiento para este año y 2016 y revisó al alza tres décimas las previsiones de inflación para 2015, hasta el 0,3 %.

El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo hoy en rueda de prensa que el personal de la entidad prevé ahora que la zona del euro crecerá este año un 1,5 % y en 2016 un 1,9 %, como había pronosticado en marzo.

Asimismo el BCE pronostica que la economía de la zona del euro crecerá en 2017 un 2 % (2,1 % en marzo). Los expertos del BCE prevén una inflación para este año del 0,3 % (0 % pronosticado en marzo).

El BCE pronostica que el Índice de Precios de Consumo se situará en 2016 en el 1,5 % y en 2017 en el 1,8 %, como había calculado en marzo.

Draghi explicó que "el bajo nivel de los precios del petróleo debería apoyar los ingresos disponible de los hogares y la rentabilidad de las empresas y, de este modo, el consumo privado y la inversión".

Recordó que la inflación en la zona del euro ya subió en mayo tres décimas hasta el 0,3 % interanual, respecto a abril.

En marzo el personal del BCE había revisado al alza los pronósticos de crecimiento por la caída de los precios del petróleo, la depreciación del euro y las compras de grandes cantidades de deuda, sobre todo pública.

Draghi, dijo hoy que la entidad monetaria comprará grandes cantidades de deuda, sobre todo pública, hasta finales de septiembre de 2016 y, en definitiva, hasta que suba la inflación.

Previamente el BCE decidió dejar inalterada su tasa de interés rectora en el mínimo histórico del 0,05 % para impulsar la actividad económica y evitar una recesión.