La agencia Standard & Poor's (S&P) ha anunciado su intención de revisar la metodología que emplea para calificar al sector bancario, lo que podría tener un "modesto" impacto en los 'ratings' actuales de las entidades, aunque en el caso de "aproximadamente la mitad" de los grandes bancos se vería traducido en rebajas de un escalón en sus calificaciones a largo plazo.

S&P ha explicado que los cambios tienen como objeto hacer más "transparentes" las calificaciones, centrando los análisis de beneficios de un banco en su capacidad para proteger el capital y cubrir pérdidas, así como separando los estudios sobre la financiación y liquidez de un banco, incluyendo los primeros en la evaluación de la posición de negocio.

Asimismo, para la asignación de 'ratings' se pondrá "menos énfasis" en los beneficios "no demostrados" de la diversificación y más en los riesgos derivados de la complejidad añadida de los derivados fuera de balance y la financiación estructurada.

La agencia ha realizado estimaciones en 138 bancos de 23 países, donde están domiciliadas el 80% de las entidades que supervisa, y ha concluido que el impacto sería "modesto", si bien advierte que esto puede cambiar en función de los análisis reales que se produzcan finalmente.

En cualquier caso, asegura que el 85% de las calificaciones crediticias a largo plazo seguiría igual o variaría en un peldaño, ya sea al alza o a la baja, si bien en el restante 15% la franja de variación podría ser superior.

Asimismo, la agencia admite que "para aproximadamente la mitiad de los grandes bancos, los resultados muestran que los cambios de criterio se traducirían en rebajas de "habitualmente" un escalón y las estimaciones elaboradas por la propia agencia apuntan a que menos del 20% de las entidades con un rating 'A-1' o superior se verían recortadas.

Las crisis financieras, una constante

S&P justifica estas modificaciones porque considera que las crisis bancarias han sido una constante durante la historia financiera y volverán a repetirse tras la actual, con el mismo patrón de auge y caída del sector, seguido por rescates de los gobiernos.

"Queremos asegurarnos de que las lecciones de la reciente recesión económica no son olvidadas cuando las economías nacionales se recuperen y el próximo periodo de condiciones favorables dé lugar al crecimiento y atractivos beneficios bancarios", señala S&P, que abre esta propuesta a los comentarios de clientes y analistas.