La mayoría de los directores de empresas cree que la crisis en España perdurará al menos dos años más y retrasa la recuperación económica al segundo semestre de 2011, por lo que urgen al Gobierno a tomar medidas para reducir los costes laborales y flexibilizar el mercado de trabajo.

Así consta en la segunda Encuesta a la Dirección Financiera de España elaborada por la consultora Deloitte correspondiente al tercer trimestre del año, en la que el 90% de los directores financieros preguntados consideró que es necesario actuar sobre los salarios y la baja productividad de las empresas.

Nueve de cada diez de estos altos directivos mostraron una línea más pesimista sobre la evolución económica que la que tuvieron el pasado junio, y mientras la mayoría consideró que la actual situación es "mala o muy mala", el 61% aseguró que las medidas del Ejecutivo para paliar la crisis son "muy poco efectivas". Para mejorar la situación, el 32% de los directores financieros urge a una reforma laboral, el 21% aboga por medidas de impulso fiscal, como reducir el Impuesto de Sociedades o aumentar los Impuestos Especiales, y el 20% pide un mayor control del gasto público que incluya la congelación de los salarios de los funcionarios y empleados públicos y la eliminación de ministerios.

Además, la mayoría de los encuestados se mostró en contra del aumento del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) contemplado por el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado para 2010, y sólo el 63% de los altos cargos del sector de la distribución consideró que este impuestos debería aumentar.