Para hacer frente a este situación, los responsables del área de construcción de UGT y CC.OO., Rafael Cañas y Antonio Garde, respectivamente, solicitaron al Ejecutivo que invierta en la construcción de infraestructuras, como puede ser "desde puertos, carreteras y vías ferroviarias hasta colegios y hospitales", con el objetivo crear nuevos puestos de trabajo.

Además, Garde declaró que los principales perjudicados de esta pérdida de empleos son "fundamentalmente los inmigrantes", así como los trabajadores mayores de 55 años. En este sentido, manifestó que en los próximos dos años se van a perder "decenas de miles" de puestos de trabajo, que afectarán a los empleos menos cualificados, que suelen estar ocupados por extranjeros.

Actualmente, hay 2,7 millones de personas trabajando en esta actividad económica, de las que medio millón son inmigrantes. Los sindicatos señalan que estas cifras no recogen el número de 'sin papeles' que están empleados de manera irregular.

Por su parte, el gerente de la Asociación de Promotores Constructores de España, Julio Gil, coincidió con la valoración realizada por las organizaciones sindicales. "La desaceleración en la construcción lleva a una caída del empleo, y los empresarios echan a las personas con menor calificación, que en la mayoría de los casos coincide que son inmigrantes. El cambio de tendencia ya se está empezando a notar entre los trabajadores extranjeros", afirmó.

DESTRUCCIÓN DE 250.000 EMPLEOS

Recientemente, el Servicio de Estudios del BBVA presentó un informe en el que se prevé que en los próximos dos años se destruyan hasta 250.000 empleos en el sector por la ralentización de la edificación de viviendas, que sólo en 2008 caerá el 3,5 por ciento.

La entidad bancaria estima que la caída de la edificación residencial supondrá la destrucción de 90.000 puestos de trabajo en 2008, cifra que podría alcanzar los 160.000 en 2009.

Del mismo modo, el informe del BBVA descarta un descenso brusco del empleo dado que durante este año todavía estarán en construcción una parte de las viviendas iniciadas en los dos últimos años. Además, el banco destaca que el buen funcionamiento de otros sectores (como el de servicios) compensará la destrucción de puestos de trabajo que se producirá este año.