Tras la reunión en la sede del Banco de Pagos Internacionales (BPI) en Basilea (Suiza), el presidente del Banco Central Europeo (BCE) y portavoz del G-10, Jean-Claude Trichet, dijo que las entidades monetarias ejecutarán acciones coordinadas para inyectar más liquidez en los mercados de dinero en caso de que sea necesario.

La Reserva Federal estadounidense (Fed), el BCE, el Banco de Canadá, el de Inglaterra y el Banco Nacional Suizo inyectaron a finales de diciembre efectivo en los mercados de forma conjunta para reducir los tipos de interés interbancarios.

La Fed y el BCE ofrecieron conjuntamente dólares a los bancos comerciales de la zona del euro, que se prestaban dinero a mediados de diciembre al 4,95 por ciento, porcentaje que se alejaban mucho de la tasa rectora que fija el banco europeo que está en el 4 por ciento.

El tipo de interés del BCE es la tasa mínima de puja en las operaciones de refinanciación que lleva a cabo la entidad monetaria.

Tras esta acción coordinada, los tipos de interés en el mercado interbancario del euro han bajado algo.

El Euribor a tres meses se situó hoy en el 4,61 por ciento y a doce meses en el 4,65 por ciento.

Desde el inicio de la crisis crediticia a comienzos de agosto, el BCE ha inyectado liquidez en el sistema financiero para restaurar la confianza de los bancos, que rehúsan prestarse efectivo entre ellos.

Trichet hizo hincapié en que todavía no son claros los efectos que tendrá la actual crisis financiera en la economía internacional.

El banquero francés señaló que el crecimiento de la economía internacional es robusto pero que existen riesgos a la baja.

Los gobernadores de los bancos centrales del G-10 se reúnen cada dos meses bajo los auspicios del BPI en Basilea para analizar la situación de la economía mundial.