La transacción consiste en la venta de ABN Amro North America Holding Company, en la que se engloban las actividades de banca minorista y comercial de LaSalle Bank Corporation, mientras que los negocios de ABN Amro North American Global Markets y Global Clients no forman parte de la operación.

La venta de LaSalle supondrá una plusvalía para ABN Amro de aproximadamente 7.300 millones de euros que serán anotados en las cuentas del cuarto trimestre de la entidad holandesa.

El presidente del consejo de ABN Amro, Rijkman Groenink, mostró su agradecimiento a los trabajadores de la filial estadounidense por su "duro trabajo en un periodo de incertidumbre para garantizar que la transacción fuera completada en la fecha planeada".