El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, auguró ayer que la temporada turística veraniega será bastante buena, a pesar de los inconvenientes de un euro fuerte, la mala situación económica de algunos países emisores de turistas y la mayor competencia en el área mediterránea. Montilla apuntó que cada vez es más difícil hacer previsiones "acertadas como las de hace años" porque los turistas confirman sus viajes con menos antelación y utilizan más las nuevas tecnologías para contratar sus vacaciones.