La Comisión Europea adoptó ayer varias decisiones sobre vigilancia presupuestaria con sendos informes de la situación de Holanda, cuyo déficit ha superado el valor de referencia del 3% en 2003, y Reino Unido, por superar también esa cifra, así como una advertencia a Italia por su déficit y por la deuda pública.

Con estas decisiones, el nuevo comisario de Economía y Asuntos Monetarios, Joaquín Almunia, se estrena aplicando el Pacto de Estabilidad y Crecimiento en un espíritu de continuidad con su predecesor Pedro Solbes, hoy ministro de Economía. "Es fundamental garantizar la continuidad de las decisiones de la Comisión y el cumplimiento de los Tratados, por lo que nuestras decisiones deben ser transparentes y predecibles", dijo.

Según Almunia, no existe ninguna contradicción entre seguir aplicando de este modo los compromisos del Pacto y estudiar una modificación de "algunos de sus aspectos". "Sólo aplicándolo podemos saber lo que debe ser reformado", dijo.

A este respecto manifestó que esperará a la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE respecto a la suspensión del Pacto decretada por el Ecofin para los expedientes por déficit excesivo de Alemania y Francia. Después, "actuaremos en consecuencia" teniendo en cuenta la experiencia de la aplicación de los instrumentos de supervisión presupuestaria, agregó.

El Colegio de Comisarios emitió asimismo una recomendación para poner fin al procedimiento por déficit excesivo abierto contra Portugal en noviembre de 2002.

Tanto Holanda como Reino Unido obtuvieron un déficit público de más del 3% en 2003. Para uno y otro país, las previsiones contemplan una mejora en sus resultados.

Sobre Italia, Almunia anunció una alerta en base a un alejamiento de los objetivos fijados en los programas de estabilidad sucesivos, debido a previsiones excesivamente optimistas de crecimiento.