El año 1987 cerró con dos meses, octubre y noviembre, en los que el diseño fue protagonista absoluto. En octubre se celebra en Murcia el III Encuentro Nacional de Escaparatismo. El cartel del Encuentro lo realizan Severo Almansa y Martínez Gadea; un homenaje a la moda (a las revistas de moda) de los años treinta y cuarenta. La moda, un sector económico que factura en la región a finales de los ochenta casi 30.000 millones de pesetas y cuenta con más de cien empresas instaladas en la Comunidad.

En 1987, Martínez Gadea y Severo Almansa ya habían desarrollado una importante e influyente labor en el campo del diseño; ambos vienen trabajando, conjuntamente, como diseñadores, desde aquella mítica exposición celebrada en diciembre de 1980, junto a Antonio Ballester, en la Sala Municipal de Santa Isabel: El Dibujador, presentada por un cartel de Gadea y Almansa (un lápiz, en tonos blancos y rojos, que flota sobre un azul añil denso y profundo, y deja ver sutilmente los textos compuestos en elegante Helvética de color verde) que fue seleccionado como parte de una exposición itinerante de ilustración, carteles y vídeo que recorrió Europa, siendo incluido en el prestigioso anuario de arte y diseño European Ilustration.

El Dibujador sería la marca (a la que finalmente no se sumó Ballester) bajo la cual Vicente y Severo colaborarán a lo largo de un tiempo; hasta que decidieron firmar sus piezas colocando sus nombres de forma indistinta. Las jornadas de escaparatismo de 1987 son el preámbulo de otro acontecimiento.

Entre el 30 de noviembre y el 5 de diciembre tienen lugar en Murcia las I Jornadas Nacionales de Diseño. Vicente y Severo realizan la gráfica de las Jornadas: un inteligente diseño planteado reutilizando como tipografía logotipos ya existentes en el mercado. Para las ‘A’ de la palabra ‘JORNADAS’ recurrieron a su propio logotipo del Almudí y al diseñado por Alberto Corazón para Anaya; incluyeron en la palabra ‘NACIONALES’ el nombre de la revista ON -que está especializada en arquitectura y diseño-, y remataron ‘DISEÑO’ con una divertida utilización de la reinterpretación de la cabeza de Tintín que Peret había creado y difundido en su cartel Tíntin a Barcelona, de 1984.

Unos pocos ejemplos de los 25 empleados en el cartel (a finales de los ochenta la reflexión sobre la influencia de las marcas en la sociedad y en el arte estará presente en la obra de relevantes artistas plásticos). Ricard, Miguel Milá, Larrea, Cirici, Juli Capella, Rosa María Pereda, Juan Pina, Albert Isern, Oriol Bohigas, José María Morera…, lo más significado del diseño nacional, asisten a las Jornadas que convierten a Murcia en referente nacional.

Las Jornadas se complementan con tres exposiciones: en Cajamurcia, Carteles de una Década, selección de carteles de Albacete, Alberdi, Severo Almansa, Antonio Ballester, Baldo, Carbonell, Chipola, Manuel Delgado, Ekipo, Ángel Saura, Ignacio García, Gaya, Haro, Manzano, Martínez Gadea, Martínez Mengual, Romera, Pablo y Manolo Portillo y Paco Salinas; en la Convalecencia, Diseño industrial y de moda realizado en Murcia; en el Almudí, Diseño en España. El diseño, que ha contribuido a hacer de España un lugar de moda en el mundo y de Murcia una región plenamente integrada en la movida nacional.

Finalizando los ochenta, nos encontramos en el momento feliz, la edad de oro del diseño en Murcia, un valor añadido que miman y cuidan las instituciones. Y con dos diseñadores, Gadea y Almansa, convertidos en un claro ejemplo a seguir.