Catalogado como Espacio Natural Protegido, el Parque Natural de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña se presenta como uno de los lugares de la Región de Murcia con mayor biodiversidad tanto en su flora como en su fauna, encontrando allí especies como el halcón peregrino o el águila perdicera, que encuentran en las zonas boscosas de pino carrasco y en los algarrobos un ecosistema más que propicio para su supervivencia.

La variedad de playas del lugar permite visitar algunas tan conocidas como la Playa Larga o la de las Cañas, o si se prefiere un amiente algo más íntimo, la Cala Magre o la de los Dentones esperan para ser disfrutadas en un entorno totalmente natural que invita a la relajación.

Un paraíso salvaje

Sus playas prácticamente vírgenes y la presencia total de la naturaleza representada por una enorme variedad de animales y vegetación convierten a este lugar, rodeado por áridas sierras y un sistema de dunas fósiles, en uno de los destinos más acertados si lo que se busca es desconectar del frenético ritmo del día a día, o simplemente conectar con la propia naturaleza de un modo más puro.

La cierta dificultad para acceder a algunas de sus playas es un claro indicativo de la escasa presencia del hombre por estos lugares, en los que los chiringuitos y comercios no son nada habituales. Algo así como el 'viaje del héroe' necesario para comprender de una manera profunda el carácter único de Calblanque y de la importancia de su conservación si se pretende seguir disfrutando por muchos años de uno de los rincones más puros de toda la Región de Murcia.