e aquella mítica primera hornada del heavy metal español, Obús, camino de su cuarenta aniversario, es el grupo que ha llegado en mejor estado de forma a 2020, y sin pelearse entre ellos. De hecho, durante esta última década han seguido dando conciertos por toda España -simepre y cuando Fortu, su icónico vocalista, no estuviera metido en algún reality-, pero lo cierto es que sus fans estaban ya ansiosos por escuchar nuevo material de la banda. Así, en diciembre lanzaban su décimo disco de estudio, Con un par, demostrando así que siguen al pie del cañón como una de las bandas punteras de rock nacional.

La banda, que sorprendió a todo el mundo con su potente música y una imagen envuelta en cuero negro y llena de tachuelas, publicó en 1982 su segundo álbum, Poderoso como el trueno, pero fue en 1984, con Tino Casal aún como productor y el ingeniero de sonido de los Judas Priest en la mesa de mezclas, cuando alcanzaron su consagración definitiva en el panorama musical español.

La carrera de Obús se mantuvo en la cumbre hasta 1990 con sus siguientes discos: Pega con fuerza y Dejarse la piel y, aunque el desolador panorama que se presentaba para el heavy durante los noventa hizo al grupo apartarse momentáneamente de los escenarios, en 1996 volvieron a componer temas, reflejados en su regreso discográfico en octubre del 2000 con Desde el fondo del abismo. A éste le seguirían Segundos fuera (2003) y Cállate! (2010).

Arriesgando desde sus inicios, con el título escogido para su último disco demuestran que, aún siendo un grupo veterano, siguen sorprendiendo con una energía en directo a la altura de muy pocos. Obús, liderados por Fortu Sánchez y Paco Laguna, están viviendo una segunda juventud y están listos para dejar este sábado la sala Garaje Beat Club de Murcia patas arriba con su hard rock y heavy metal clásico. «¡Va a estallar el obús!».