Para este fin de semana tenemos en Murcia tres talleres especialmente indicados para el público infantil. El primero es en el Museo de Bellas Artes, Mubam, que cuenta con una sala dedicada precisamente a hacer manualidades con los niños. Con motivo del acercamiento de la Semana Santa, y previa visualización de las obras que hay en el museo relacionadas con esta temática, mañana, los interesados podrán disfrutar con las actividades que les propongan los monitores del centro desde las once hasta las doce y media de la mañana. Para apuntarse hay que llamar previamente al 968 239 346.

El Museo de Santa Clara también se centrará en la Semana Santa este fin de semana. 'Tambores y caramelos. Así son nuestros nazarenos', es el título del taller que se realizará tanto este sábado como el próximo (13 de abril). Aquí el horario es de tarde, desde las cuatro y media hasta las seis. La manualidad que van a llevar a cabo los niños irá relacionada con un paso de Salzillo, en concreto, La última cena. Pueden apuntarse en el teléfono del museo: 968 272 398.

El domingo, el Museo Arqueológico de Murcia oferta el taller 'Relieves escultóricos'. La escultura servirá a los monitores y a los niños de elemento conductor a través de la historia: los participantes conocerán la importancia y el papel que desempeñaban en la antigüedad los elementos escultóricos, y se fijarán con detenimiento en los tiempos de los romanos. El horario de la actividad es desde las once y media hasta la una del mediodía. Para apuntarse a los talleres del Arqueológico, que son gratuitos, basta con llamar al 968 234 602.

Tres opciones en tres espacios cuyo nexo de unión es que son espacios museísticos de la Región de Murcia, siempre abiertos a todo el público en general, pero que los fines de semana acostumbra a centrar su atención en los más pequeños. Como sabéis, yo recomiendo siempre asistir a los museos con los niños, al menos un par de veces al mes. Es fundamental en estas edades familiarizarles con estos espacios; si nos les damos esa oportunidad ahora, no les damos opciones para poder elegir en un futuro sus inquietudes artísticas o de conocimiento.

Los museos no sólo son espacios cerrados y apolillados, con vitrinas o cuadros inertes, son más bien lugares de tránsito entre lo que se expone y quien los visita. Si frecuentamos los museos con los niños les regalamos dosis de conocimiento que luego pueden extrapolar a las cosas que aprenden en la escuela. Digamos que aportamos el sentido vivencial de lo que luego sucede en las páginas de un libro. Y, sobre todo, son espacios con múltiples interconexiones con la vida misma.

Por ejemplo, la Semana Santa y los talleres que se hacen tanto en Las Claras como en el Mubam les van a acercar, por un lado, a un icono como es Salzillo en lo que es el Barroco, y a pintores cuya temática se focalizaba en esas fechas de fe.

Por otro lado, del Museo Arqueológico se pueden llevar otra visión de la escultura. Para un niño, este arte no es desconcido -en cierta medida-: las manos de los más pequeños empiezan a modelar y a manejar la psicomotricidad fina con artilugios como la plastilina. Aquí verán que existe el barro, el mármol, y cómo de una piedra se pueden generar esculturas tan espectaculares como las que hacían los romanos. El MAM condensa en este taller un salto desde el siglo en el que estamos hasta la Antigüedad.

Tras la realización de este tipo de ofertas didácticas enmarcadas dentro de lo que es el taller como recurso educativo, podemos aprender cómo se hacen para tener en casa una zona de trabajo similar. Lo que no debe de faltar en una casa en la que haya niños son colores, tijeras, fixo, cartulinas, ceras, plastilina, pasta de modelar, pinceles y pintura acrílica. Con estas cosas, os puedo asegurar que el día que no sepamos qué hacer con los críos, se entretienen lo que no está escrito.

Además, os recomiendo que si podéis quedaros en algún taller lo hagáis, para ver cómo se trabaja con niños. En caso de que no sea posible, podéis preguntar dudas a quienes los impartan, por si queréis hacer cosas parecidas en casa. No hace falta que hagan todos los talleres, pero al menos que vayan a alguno de ellos, son gratuitos y especialmente indicados para niños.