Ariadna Gil interpreta a la heroína romántica Jane Eyre en la adaptación teatral de la novela de Charlotte Brontë, que mañana se representa en el Teatro Romea, una obra que, según añade la directora Carme Portaceli, representa «un canto a la lucha por la libertad».

Portaceli, que junto a Ariadna Gil cuenta con Abel Folk para el papel del atormentado Mr. Rochester, explicó durante la presentación de la obra que «lo más fantástico del personaje de Jane Eyre y de esta novela es que, desde su nacimiento, tienen un instinto de superación impresionante». Sobre el tono del montaje, la valenciana asegura que entre sus intenciones no estaba «potenciar el drama»: «No me interesa. Pasa lo que pasa. Ella lucha, pero no hay un tono dramático».

Al respecto, Gil puntualiza que «Jane Eyre tiene mucha ironía, sobre todo teniendo en cuenta que ella habla desde el final de la historia». La actriz catalana indica que con la lectura de la novela de Brontë, enmarcada en la época victoriana y publicada bajo seudónimo en 1847, descubrió «un mundo y una época y el impulso y la fuerza del personaje». No obstante, el montaje no sitúa la trama en una época determinada, pues «no se ha trasladado la acción a la actualidad, pero tampoco se ha hecho una obra de época; se busca simplemente trasmitir las emociones», precisa Portaceli.

Cuando leía la novela para preparar el montaje, Ariadna Gil percibió que «la naturaleza es un personaje más», y ahí estribaba la dificultad en la adaptación teatral. «En cine es mucho más fácil de enseñar, pero en teatro se consigue, como en este caso, con unas proyecciones», advierte Gil.

Por su parte, Folk califica su personaje como «un sufridor que encuentra un estallido de lucha por la libertad individual y de lucha por la justicia». En aquella época, como hoy, añade el hombre que interpreta a Mr. Rochester, «encontrar una Jane Eyre, una persona tan íntegra, también nos sorprendería».

Jane Eyre, continúa Portaceli, es «una obra romántica en la que la lucha por la libertad es el impulso que guía a la protagonista en un mundo en el que las mujeres no la podían conseguir». Sin embargo, el espectador descubre también una historia de amor que sólo se hace realidad cuando «los dos protagonistas hablan de igual a igual, cuando el amor ya no es una cárcel, sino un acto de libertad».

La música original del montaje es obra de Clara Peya, quien interpreta la banda sonora de Jane Eyre en directo, junto con la pianista Laia Vallès y la violonchelista Alba Haro.