La palabra ´chulla´, derivada del quechua, en Quito (Ecuador), significa ´impar´, pero en España es el término usado para nombrar a una loncha de carne; en nuestro caso, una loncha de los magníficos jamones que, desde 2009, nos ofrece Francisco Fernández-Montesinos con la ayuda de María del Mar Guillamón en sus dos locales de jamonería y venta de productos gourmet en la murciana calle de San Lorenzo, y más recientemente en su nuevo local en la planta alta de la Plaza de Abastos de Verónicas.
Y lo mejor, antes de comprar, por piezas o por lonchas al corte, cualquiera de los excelentes jamones ibéricos o de Chato Murciano que nos ofrecen, podremos degustarlos in situ regados con los mejores vinos o cervezas artesanales. Jamones o lomos ibéricos, de Chato Murciano, cecina de León, aceites selectos, legumbres y frutos secos a granel, más de una veintena de referencias de quesos y diferentes productos gourmet (pates, espárragos, etc.) completan la singular oferta de La Chulla Ibérica en cualquiera de sus dos establecimientos.
El jamón de primerísima calidad es, sin duda, su producto estrella con variedades como el más caro de Sánchez Romero Carvajal, como el 5 Jotas Joselito, jamones de cebo de Guijuelo, de cebo de Campo de Cáceres, de bellota puro de Los Pedroches, de bellota de Badajoz o de Huelva; variedades que completan una oferta que también incluye decenas de referencias de los mejores vinos nacionales y de la Región.
