Santi Rodríguez aterriza con un espectáculo unipersonal: Como en la casa de uno... en ningún sitio. «El extranjero es muy bonito pero está lejos y hablan muy raro», dice el humorista, quien añade que «de todas formas, hay que viajar siempre que puedas. Conocer gente de todos sitios, está bien. La mayoría es gente muy simpática, aunque como no sabes lo que hablan lo mismo te están sonriendo mientras te dicen que nos van a cobrar el doble porque eres guiri». Lo curioso de salir fuera para Rodríguez es «que te conviertes en guiri sin darte cuenta y los guiris dejan de serlo porque son de allí, de donde tu estás...» ¿Que no queda claro? En el Teatro Villa de Molina y lo explica hoy todo despacico...