Tres mujeres, tres ciudades y una isla diminuta. Real como la vida misma, esta es la pequeña gran historia de cinco entrañables canciones que llegaron cuando nadie las esperaba. Roger Álvarez, un actor de largo recorrido, nos propone un insólito viaje a través de vivencias y recuerdos que, como en un tobogán de emociones, nos pueden conducir hasta la carcajada.
Pequeña suite emocional se gestó en el singular espacio MajareTa, en Madrid. Tras una gira por la península, en noviembre de 2016 regresó a la capital, esta vez al prestigioso Lara Off, cosechando un gran éxito de crítica y público.
Se trata de un monólogo con mucho humor, donde también hay lugar para la ternura y la nostalgia. Pequeña suite emocional contiene cinco historias en las que también se habla de pérdidas, de hallazgos y de superación. Es un canto a la alegría de vivir y, aunque se cantan cinco canciones, lo que predomina es la palabra, en sus trepidantes 85 minutos. Y aunque todo está perfectamente medido, también hay margen para lo inesperado, lo imprevisto, lo sorprendente, lo sublime y lo ridículo. Se habla de la grandeza de lo pequeño y lo cotidiano en contraste con la levedad de lo inmenso y lo sobrenatural.
Es un espectáculo íntimo, sencillo, sin microfonía, que se adapta a cualquier espacio y que este fin de semana tendrá cabida en La Madriguera de Puente Tocinos.
