Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Entrevista | Futbolista del Albacete

Higinio: "No hace falta jugar en el Madrid o el Barça para sentirte un futbolista realizado"

Higinio Marín Escavy (Calasparra, 10 de octubre de 1993), que juega en el Albacete, ha publicado el libro El partido de mi vida, donde hace un recorrido a su trayectoria y cuenta cómo trabajar con un psicólogo deportivo le ha ayudado a sentirse realizado.

Higinio Marín Escavy.

Higinio Marín Escavy. / José Javier Martínez Ruiz ‘Jota’

Dioni García

Dioni García

Higinio Marín, en el libro El partido de la vida, abre su corazón. Con la ayuda de los psicólogos Enrique Garcés y Ana Peinado, ha publicado un relato con la editorial Pluma Verde donde explica por qué tuvo que recurrir a ayuda profesional, también la relación con sus padres y con su representante, Daniel Barceló, que es algo más que un agente para él. El futbolista del Albacete Balompié lleva varias temporadas en el fútbol profesional haciendo goles y cumpliendo el sueño de un niño calasparreño que siempre ha estado ligado al balón.

¿Cómo se te ocurrió escribir un libro sobre tu vida cuando aún estás en activo?

No salió de mí. Hace tiempo que empecé a trabajar con un psicólogo deportivo, cuando estaba en Bulgaria y sufrí una lesión bastante importante. Y cuando trabajas con un psicólogo, al final le cuentas todo o la mayor parte de tu historia. Enrique Garcés de los Fayos, que es el psicólogo, y su mujer, Ana Peinado, fueron los que me ayudaron a salir de esa situación. Pero les gustó mi historia y me plantearon si quería plasmarla en un libro.

¿No te dio un poco de recelo contar tu vida?

Un poco sí, pero me hizo más ilusión que reparo por tener la oportunidad de abrirme, de poder ayudar a niños, a gente joven que quiere llegar a ser profesional, y aportar la idea de que la psicología te ayuda mucho para rendir, así como que no hace falta ser un futbolista de un Madrid o un Barcelona para disfrutar del deporte y vivir de ello, poder dedicarte a ello sin ser una súper estrella y siendo un jugador humilde.

He podido leer el libro y me ha quedado un mensaje claro, que eres una personal totalmente realizada pese a no haber jugador nunca en Primera División.

Sí, al final el fútbol es por donde se ha movido mi vida. Gracias al deporte yo tengo unos valores, una educación y ganas de levantarme cada día para poder dedicarme a lo que me gusta.

¿Y cómo te sentiste en ese momento clave de tu vida donde sufriste la lesión?

Ha sido la única lesión grave. Es verdad que fue fortuita, porque se quedó el pie debajo de un rival y el tobillo hizo crack. Ahí sentí que toqué fondo, porque aparte de ser grave, tuve que operarme y al psicólogo al que recurrí le gusto mucho cómo afronté la situación mentalmente y la forma en la que salí, llegando al Albacete y haciendo años bastante buenos. Con mi historia intento ayudar a esos niños que empiezan o a futbolistas que sufren problemas y a los que muestro que se puede salir.

Para alguna vez que hemos sufrido una depresión, es agradable que alguien con un reconocimiento social cuente que ha recurrido a un psicólogo abiertamente porque nadie quiere hablar de ello, quizás porque aún hay muchos tabúes.

A ver, yo no sé si hay tabúes o no, pero si alguien lo tiene es algo personal porque a mí no me afecta nada hablar que trabajo con un psicólogo porque el deportista o el futbolista profesional está sometido a mucha presión y no todas las cabezas lo llevan o soportan bien. ¿Cuántos deportistas profesional se han retirado por la presión o han parado porque no pueden llevar eso bien? Si hay tabúes es un problema del que los tiene, pero más que tabú considero que se sienten avergonzados porque te ha ayudado otra persona a trabajar personalmente. Mi psicólogo, mi mujer y mi familia son los que me han ayudado a salir adelante y no tengo ningún problema en contarlo.

En el libro hablas mucho también de tu familia. ¿Fueron esos años determinantes en tu vida a nivel de formación?

Sí, totalmente. Ahí te das cuenta que tus padres tienen tres trabajos, que es el suyo para llevar dinero a casa, la crianza y luego, entre comillas, poder llevar a sus hijos a actividades extraescolares, a mí al fútbol, a mi hermana a gimnasia rítmica y a mi otro hermano a música. Es increíble ver cómo tus padres se multiplican para cumplir tus sueños y preparar tu futuro. Me di cuenta un poco tarde porque los niños no se dan cuenta de esas cosas, pero suficientemente a tiempo.

También cuentas en el libro cómo te afectó el fallecimiento de tu padre.

Me afectó muchísimo y viví un año muy complicado. La temporada pasada fue muy complicada para mí, aunque con los pocos minutos que tuve, acabé con bastantes goles. Fue un año muy difícil porque detectaron la enfermedad de mi padre con 59 años y se fue con 60. Es una putada, pero hay muy pocas familias a las que no les haya tocado este caso de cerca. Es una situación que desgraciadamente está a la orden del día y es complicado que estés centrado en el deporte, porque vinieron noches sin dormir, días con muchos viajes para poder estar con mi padre en sus últimos, y gracias al psicólogo salí adelante.

Como muchos futbolistas, has pasado por una montaña rusa. Recuerdo cuando te fuiste del Murcia. ¿Te afectó mucho no poder cumplir el sueño de jugar con el equipo de tu tierra?

No me afectó. En aquella etapa estaban unos dirigentes que ahora no están, pero no contaban conmigo y tuve que salir a buscarme la vida, pero creo que fue una de las mejores decisiones que he tomado porque si me hubiese quedado, quizás no habría llegado al fútbol profesional. Salí de mi zona confort, vi la realidad, vi que había que pelear y al revés, no me afectó, tiré hacia arriba.

¿Eres conformista o inconformista?

Creo que las dos cosas. Tengo una mezcla de las dos porque cuando me retire creo que estaré conforme con mi carrera, pero ahora que estoy en activo soy inconformista, siempre quiero más. Creo que tengo parte de las dos.

¿Has sido padre?

Estoy casado pero aún no he sido padre. Es un paso muy importante, pero mi pareja y yo lo hemos hablado, creemos que no es el momento todavía y que no estamos preparados para ello. De momento vamos a esperar.

¿Cómo has visualizado ese momento en el que se acabará el fútbol?

Sí que lo he visualizado. Yo quiero estar ligado al fútbol y me gusta mucho el fútbol de formación, de las bases. Estoy con el curso de entrenador y este año ya voy por el nivel 3. Estoy dándole caña porque cuando deje el fútbol quiero seguir siendo entrenador de niños, cadetes, infantiles, alevines, de fútbol de formación, que es el que más ha marcado mi etapa.

¿Y los estudios, cómo los llevaste?

Sí, tengo hasta Bachiller junto con la prueba de acceso que es lo que me ha permitido hacer el grado 3 de entrenador. No tengo estudios universitarios pero no descarto hacerlos.

Llevas varias temporadas en Albacete donde has pasado por todas las situaciones. ¿Eso curte?

Sí, eso es, pero me ha pasado desde que estuve en el Numancia, cuando en mi primer año jugamos el play off de ascenso a Primera y nos eliminaron en la final, y al año siguiente nos salvamos en el último partido. Y ya en el último en Soria descendimos. Y en Albacete jugamos el primer año el play off, que nos eliminaron en semifinales, el siguiente nos salvamos en la penúltima jornada y en el pasado acabamos novenos. Es verdad que estuvimos rozando el descenso hasta el final del año, pero acabamos en mitad de tabla. En Albacete he pasado por todo, pero por suerte nunca hemos descendido.

¿Cómo te gustaría que te recordaran cuando te retires del fútbol?

Me gustaría que me recordaran como el delantero humilde y trabajador que ha llegado al fútbol profesional gracias a ello, sin más.

Pues todo el mundo dicen que eres buena persona.

Bueno, es cierto que me lo dicen, pero al final es la educación que me han transmitido mis padres y yo me siento muy orgulloso de ello.

Pues educación es lo que falta mucho en el fútbol.

Sí, eso también se muestra en el libro, cómo se comportaron mis padres conmigo. Mi madre me acompañaba a los partidos y es un ejemplo porque nunca decía nada. Solo la veía que disfrutaba viéndome jugar. Y eso es lo que tienen que hacer los padres, no pensar que sus hijos, con diez o doce años, son Messi o Cristiano Ronaldo, que hay que dejarlos disfrutar.

Por cierto, últimamente han salido a la luz futbolistas como Llorente y Borja Iglesias que han expresado opiniones políticas. ¿Crees que vosotros tenéis que posicionaros?

Yo creo que cada uno es libre de opinar lo que quiera y de posicionarse en todo lo que le parezca bien. En mi libro hablo de mi historia personal, de mi afán de superación y de mis valores. Cada uno, a través de la voz que tiene y de su libertad puede hacer o decidir lo que quiera. Pero yo nunca me suelo exponer, nunca hablo de política ni nada de eso, porque si estás aparte de cualquier comentario que hagas, mucho mejor.

¿Te mueves en las redes sociales?

No me suelo mover. No tengo Twitter ni Facebook e Instagram me lo quité hace un más. Más que nada lo he hecho porque hay gente que escribe comentarios sin educación, que aunque sea una minoría, lo hace a través de una pantalla, sin conocer la situación de cada personal, y en el fútbol son desconocedores, en parte, de la dedicación que tenemos y aprovechan cualquier cosa para criticar. No me oculto, pero cuando tenía Instagram y me salía un mal partido, me metía a ver los comentarios y me afectaban. Por eso he decidido no tener redes sociales y que la gente opine y me diga lo que quiera cuando me ve por la calle o al salir de los partidos.

¿Habrá otro libro?

A ver, hay intención de ello si sigo disfrutando de mi carrera, que yo quiero alargar al máxima, pero en estos momentos está en el aire.

¿Cuánto le ha llevado hacer este?

Ha llevado unos seis o siete meses. Por las tardes quedaba con Enrique Garcés, que se desplazaba a Albacete y mantuvimos muchas entrevistas en persona. Yo le fui contando todo de mi vida y fue un proceso largo e intenso. A él le encanta escribir, ha sido parte importante de mi vida y tenemos una relación de amistad. Si no hablamos todos los días, sí dos o tres veces a la semana.

Tracking Pixel Contents