El Real Murcia y Mario Simón se ven las caras en los juzgados

Visto para sentencia. Así ha quedado el conflicto que mantiene Mario Simón y el Real Murcia desde el verano de 2023, cuando ambas partes separaron sus caminos. La pasada semana, en el Juzgado de lo Social, tanto el entrenador del ascenso a Primera RFEF como el club grana se veían las caras después de no haber sido capaces de llegar a un acuerdo a lo largo de los últimos catorce meses. Y es que el club murcianista, que en junio de 2023 decidía poner fin al contrato del madrileño, se ha negado a abonar algunas de las cantidades establecidas en ese documento correspondiente a la temporada 2022-2023, la segunda de Simón al frente del banquillo murcianista.

Serán los juzgados los que determinen quién tiene razón en este conflicto, aunque el Real Murcia, en la mayoría de ocasiones en las que se ve obligado a acudir al Juzgado de lo Social por incumplimientos de contratos e impagos, siempre sale perdedor.

En este caso concreto, que se viene arrastrando desde verano de 2023 y cuyo juicio se celebraba el pasado miércoles, Mario Simón reclama la nómina correspondiente a junio de 2023, su último mes como entrenador del Real Murcia; así como su finiquito y distintos premios que tenía establecidos por la consecución de determinados objetivos durante la temporada 2022-2023.

El Real Murcia, con menos fondo de armario del esperado

El entrenador madrileño acabó su vinculación con el Real Murcia el 30 de junio de 2023. La entidad grana, tras dos temporadas de la mano, decidía no ofrecer la renovación al técnico. Nada más ponerse fin a la relación, el club presidido por Felipe Moreno se desentendió de las cantidades que adeudaba a Mario Simón de esa campaña así como el finiquito correspondiente a los dos cursos en los que se había sentado en el banquillo de Nueva Condomina.

Sin respuesta por parte de los responsables del Real Murcia, que directamente dejaron el tema en manos de los servicios jurídicos, Mario Simón acudió primero al Comité de Entrenadores de la Federación Española de Fútbol, un movimiento que sí llevó a actuar al club, abonando la prima por el ascenso de la temporada 2021-2022, sin embargo, el entrenador madrileño seguía sin percibir algunas cláusulas que, según su defensa, le corresponden al estar incluidas en el contrato de renovación que firmó en verano de 2022, después de que el equipo se ganara el billete para jugar en Primera RFEF.

Sin conciliación

Se confirmó la total ruptura entre las partes cuando el acto de conciliación se cerró sin ninguna novedad, insistiendo el Real Murcia que no tenía que abonar las cantidades exigidas por el técnico.

Así, el pasado miércoles 25 de septiembre llegaba el capítulo que va a ser definitivo en el mencionado conflicto laboral. En el Juzgado de lo Social de Murcia se celebraba la vista entre Mario Simón y el club grana. Serán por tanto los tribunales los que determinen si las reclamaciones de Mario Simón están justificadas. En ese caso, el Real Murcia sería condenado no solo a pagar lo que se adeuda el técnico sino también a asumir todo el coste del proceso judicial.