Chris Chiozza cambia la cara del UCAM Murcia

«Cuando tienes unas dificultades como las que hemos tenido en Tenerife, tienes que tener un gen que sea totalmente contrario a la tristeza, la apatía o un lenguaje corporal malo. Y no se ve eso, no se ve desde hace bastante jornadas. Hay una actitud de que puedes ganar perdiendo de 12 contra Fuenlabrada en el primer cuarto, o perdiendo ante el Lenovo Tenerife de siete al descanso y que te empaten para ir a una prórroga. Ves las caras y piensas que puedes ganar», explicaba Sito Alonso el pasado miércoles ante los medios de comunicación tras su victoria ante el Lenovo Tenerife. Por juego y resultados, la cara del UCAM Murcia CB en las últimas semanas es totalmente otra. Y uno de los máximos culpables de que esto ocurra es Chris Chiozza.

Con un rostro impasible y de concentración, fruto de la seguridad en su juego, el base norteamericano -de 1’80 metros de estatura- apenas lleva un mes a los mandos del UCAM Murcia. Tiempo suficiente para revolucionar a todo un equipo que ahora depende de sí mismo para lograr un billete directo a la Champions League la próxima temporada. A principios de abril aceptó la oferta del club universitario para cruzar el charco por primera vez en su carrera. Después de acumular casi un centenar de partidos en la NBA y destacar en la G-League, decidió probarse en la Liga Endesa con el hándicap de firmar para tan solo ocho partidos. Aunque le han sobrado casi la mitad para sacar a relucir todo su talento.

Los 26 puntos anotados por Chiozza en el Santiago Martín ayudaron, junto a la formidable actuación del UCAM Murcia, a romper la sequía de victorias a domicilio en la Liga Endesa en la segunda vuelta. Con seis triples, el base sacó a relucir su capacidad anotadora desde e l perímetro en una competición en la que, quizá, los tres segundos defensivos están impidiendo que pueda atacar el aro de manera más asidua.

Pero lo cierto es que también cuenta con otras virtudes igual o más potentes. Y es que la inteligencia mostrada sobre el parqué en la toma de decisiones y la capacidad para buscar a sus compañeros, al ofrecerle las riendas del ataque Sito Alonso nada más aterrizar en Murcia, y elaborar un ataque mucho más colectivo, ha sido lo que verdaderamente ha cambiado las sensaciones de un equipo que acumula cuatro victorias y una sola derrota -ante BAXI Manresa- en la ACB desde su llegada.

De hecho, en el Nou Congost, a pesar de que el cuadro murciano no logró el triunfo, fue capaz de firmar 9 asistencias. Una cifra que también alcanzó Isaiah Taylor en sus primeros partidos en la ACB ante el Baskonia, en un encuentro que también se decidió en la prórroga. Quien logró los dobles dígitos en esta parcela por última vez fue Travis Trice, esta misma temporada, con 11 asistencias frente al Bàsquet Girona. Por su parte, Conner Frankamp, fue el último en firmar las diez en su encuentro ante el Fuenlabrada en el Palacio en la 2020-2021. El récord de asistencias en un partido con la camiseta del UCAM Murcia lo ostenta un Facundo Campazzo que es el máximo asistente histórico del UCAM en la ACB, y que alcanzó las quince en 2016 en la pista del Estudiantes.

Sumando las 7 ante Casademont Zaragoza y Valencia Basket, Chiozza cuenta con un total 27 en sus cinco primeros partidos en la Liga Endesa. Su cifra más baja fue ante el Carpus Fuenlabrada, en la única situación en la que ha encontrado en dificultades desde su llegada ante la defensa planteada sobre el base. Además, su esfuerzo e intensidad defensiva, prácticamente a robo por partido, dos ante el Lenovo Tenerife, también ha beneficiado en el paso adelante del UCAM para acabar el año con buen sabor de boca.