REDES SOCIALES

El tiktoker suspendido seis meses por el Real Mallorca: "La sanción me da mucha rabia, es muy injusta"

Xisco Ribas considera "inofensivas" sus palabras dirigidas a los jugadores rivales, y que todo nació "de una broma sin mala intención"

Aficionados del Real Mallorca en Son Moix.

Aficionados del Real Mallorca en Son Moix.

Redacción

Xisco Ribas, abonado del Real Mallorca desde 2018, no sale de su asombro tras haber sido sancionado seis meses por el club por "publicar vídeos ofensivos en TikTok", según el comunicado remitido al interesado por la entidad mallorquinista, que afirma haber actuado tras recibir "una denuncia formal por parte de la Liga de Fútbol Profesional" y que ha tomado la decisión porque "usted insulta a jugadores de distintos equipos con vídeos cortos que han sido grabados desde la grada Lluís Sitjar".

El joven aficionado mallorquinista, estudiante del último curso de Comunicación Audiovisual y Periodismo, subió a la red social TikTok imágenes en las que se escuchan términos dirigidos a los jugadores rivales como "cara plátano", "palo césped", "cabeza peonza" u "ojo lubina", entre otras expresiones. Ribas considera "muy injusta" la sanción. "Me da mucha rabia porque estas expresiones están dichas sin mala intención y sin ánimo de ofender".

"Fui el primer sorprendido", explica a este diario el joven aficionado. "No me esperaba nada, consideraba que no había hecho nada mal". Ribas, que ha recibido el apoyo de sus padres "desde el primer momento", cuenta cómo nació la idea de utilizar este tipo de expresiones. "Entre mis amigos empezó como una broma decirnos cosas sin sentido. Por ejemplo, que tiene los pies como una estufa. Parece un insulto, pero no lo es. De lo ridículo que es nos hacía gracia. Y un día, en Son Moix, la temporada pasada contra el Espanyol, propusimos decir frases que fueran tonterías. Lo hicimos, nos hizo gracia. Y dije, ahora probaré de subirlo a TikTok. Tuvo éxito, una semana después tenía 350.000 visitas".

"Primero lo hice sin grabar", continúa, "me iba a quedar el vídeo para enseñárselo a mis amigos y pensamos que a lo mejor a más gente le hacía gracia. Y de hecho recibí muchos comentarios de gente que le hacía gracia. Decir que te huele el pelo a beicon -dirigido al por entonces jugador del Espanyol Raúl de Tomás- hizo gracia. Es que a mí me lo dicen por la calle y me pongo a reir", añade, todavía incrédulo por la sanción.

Del castigo impuesto por el Mallorca se enteró el pasado 20 de marzo. "Me llegó un correo electrónico en el que se me comunicaba la sanción. Alegué que este vídeo no era racista ni xenófobo, y que si hiciera vídeos ofensivos TikTok no me los hubiera dejado subir. Si fueran ofensivos no los haría, no los subiría a redes y no los subiría con mi nombre. Mucha gente me acusó de que yo era el del vídeo que insultaba a Vinicius. Me defendí por Twitter que no era yo, que no era mi voz y que no estaba en esta grada. Es más, la sanción de tres años al que profirió insultos racistas a Vinicius me parece justa", subraya.

El club le respondió antes del partido contra Osasuna, el pasado 31 de marzo, sin aceptar sus alegaciones. "Pedí sin tendría algún problema para renovar el abono y me dijeron que no. La sanción es exagerada". Descarta poner el caso en manos de abogados porque no quiere ir "en contra del club. Seguramente lo ganaría, pero no quiero perder el tiempo en esto porque estoy con dos trabajos de final de carrera".

La sanción finaliza el próximo 20 de septiembre, con la próxima temporada empezada, y Ribas tiene claro que renovará el carnet por el que pagó de su bolsillo 180 euros en la grada Lluís Sitjar. "No quiero que me vuelvan a sancionar. En las alegaciones les puse que si me quitaban la sanción estaba dispuesto a borrar las imágenes. Las dejaré subidas pero no haré de nuevas", concluye con el objetivo de pasar página.