Obituario

Fallece Ángel de la Fuente, mítico jugador del Real Murcia

El talaverano, afincado en Murcia y que vistió la elástica grana en la década de los sesenta, muere a los 81 años tras sufrir una grave enfermedad

Ángel de la Fuente, rodeado de recuerdos en su casa de La Alberca, en una imagen de archivo de 2008

Ángel de la Fuente, rodeado de recuerdos en su casa de La Alberca, en una imagen de archivo de 2008 / Pilar H.Blanca

Ángela Moreno

Ángela Moreno

El murcianismo dice adiós hoy a otro de sus jugadores míticos. El talaverano Ángel de la Fuente (30-08-1941) ha muerto a los 81 años tras detectársele hace solo cinco meses una grave enfermedad. Afincado en Murcia, De la Fuente se convirtió en la década de los sesenta en uno de los grandes ídolos de la afición del Real Murcia. Llegó a la entidad grana cedido por el FC Barcelona, sin embargo, un cambio en la directiva del club permitió que el extremo toledano pudiese continuar durante tres temporadas más. Del 61 al 65 vistió la grana para posteriormente marcharse al Betis, donde jugó la temporada 65-66.

El servicio militar truncaba su carrera futbolística con solo 27 años. Tras abandonar el cuadro bético, se marchó al Real Zaragoza a la espera de conocer su destino para hacer la 'mili'. Y "salió África", lamentaba en 2008 en un reportaje en La Opinión donde recordaba su pasado grana. Colgó las botas y tras hacer el servicio militar, Ángel de la Fuente consiguió un puesto de representante de un laboratorio farmacéutico.

De la Fuente, afincado en Murcia, estaba casado con Trinidad Salvago, a la que conoció en su etapa como murcianista. De hecho, según contaba a este diario hace unos años, ella formaba parte de la sección de atletismo del Real Murcia. Ambos tuvieron tres hijos, Miguel Ángel, Raquel y Vanesa.

Ángel de la Fuente llegaba al Real Murcia cedido por el FC Barcelona en la temporada 1961-1962, sin embargo lo que parecía algo efímero se convirtió en un matrimonio a largo plazo. Todo por un cambio de directiva en el club grana. "El Barça aceptó una cesión, pero a los tres meses, al haber un cambio en la directiva esa cesión ya no tenía validez y pasé a pertenecer al club grana", explicaba el toledano en una entrevista a este diario en 2008, donde también recordaba como la capital murciana se convirtió al final en parte de su vida. Su debut con la elástica grana fue en un amistoso ante el Mallorca en La Condomina. Ese día se estrenaba la iluminación eléctrica del estadio grana. El Real Murcia ganó 2-1 y De la Fuente marcó el tanto del triunfo.

En ese reportaje, De la Fuente rememoraba además el momento en el que el Barcelona volvió a por él. "Cuando en el año 1963 el Barcelona me vio en Primera no dudó en venir a por mí, pero el Murcia pidió un traspaso de cinco millones de pesetas, a lo que el Barça se negó para evitar críticas por haber consentido la situación".

Polivalencia y entrega

Por su calidad y características, ya que era un extremo que se desenvolvía en ambas bandas, De la Fuente sobresalió por ser un futbolista polivalente. De hecho, en la etapa de Fernando Daucik como entrenador, éste lo utilizó en un buen número de ocasiones como interior. El toledano era un jugador ambidextro, que preferentemente utilizaba la pierna derecha.

No sobresalía en ninguna faceta del juego en especial, pero su buena técnica, regate, desborde y conducción de balón le hacían ser un jugador especial, con un fútbol fluido que ponía al servicio del colectivo todas sus virtudes, sin importarle el lucimiento personal.

La trayectoria del toledano en el Real Murcia no pasó desapercibida para nadie. Su fichaje por el Murcia empezó a fraguarse en 1961, cuando el club grana traspasó al Barcelona a Marañón, quien jugando en el Sabadell lesionó a Javier Clemente, circunstancia por la que éste tuvo que dejar el fútbol.

La operación se cerró por 250.000 pesetas y una opción a favor del Murcia por Blanquera, Cartañá, Rifé y De la Fuente, siendo presidente Andrés Pintado García. Los primeros en llegar fueron el delantero centro Blanquera y el extremo Cartañá. Posteriormente lo haría De la Fuente como cedido, siendo entrenador murcianita el mítico ex guardameta internacional Ignacio Eizaguirre.

En la temporada 62/63 llegó uno de los mejores momentos para De la Fuente, quien formó parte de un histórico equipo que ascendió a Primera con Ángel Fernández Picón en la presidencia y José Llopis como entrenador.

La directiva apostó por Ladislao Kubala para el regreso a la máxima categoría (63/64), pero éste, que acababa de colgar las botas, se marchó a los diez días por discrepancias con la planificación deportiva. Le sustituyó su cuñado, Fernando Daucik, quien anteriormente había dirigido al Barcelona en la famosa y recordada temporada de las cinco copas. Con una plantilla veterana pero con jugadores de un buen nivel, se aseguró la salvación, para en la 64/65 llegar al banquillo el famoso Antonio Ramallets, quien casi al final de la misma fue sustituido por el murciano Marianín. De la Fuente seguía siendo un jugador fundamental en una campaña que acabó con un descenso y que dio paso a su traspaso al Betis con José Doval Amarelle como presidente. El extremo jugó dos partidos de la 65/66 en el Murcia y se marchó a Sevilla a cambio de Gerardo (Lalo II), López Hidalgo y Breval.