De la Vega sigue con su estrategia e impugnará la Junta de marzo

El Real Murcia ha vuelto a tener noticias de Mauricio García de la Vega. Pero no debe haber pillado por sorpresa al club grana la carta enviada por el mexicano, accionista grana y que mantiene abierta una batalla judicial para que le reconozcan como el dueño del 84% del capital social. Y es que una vez más, el de Guadalajara, siguiendo la estrategia iniciada desde que fue expulsado de Nueva Condomina en 2018, ha avisado de que impugnará los acuerdos que se tomen en la Junta del próximo 8 de marzo, en la que se pretende aprobar la conversión en acciones de los préstamos realizados por Julián Luna, Agustín Ramos y Enrique Roca.

En el burofax enviado a las oficinas de Nueva Condomina, García de la Vega vuelve a advertir de la sentencia de la Audiencia Provincial que anuló la ampliación de capital de 2018. «Si dicha sentencia gana firmeza, implicará la nulidad de las demás Juntas por cuanto a ellas se debió llegar reconociendo a mi representada el 84% del capital social, lo que impide cualquier quórum de asistencia y votación para acuerdos como los sometidos a votación», indica el burofax recibido por el Real Murcia.

Además, la carta tacha de «no responsable» la actitud de los dirigentes granas, avisando que «llegado el caso, deberán rendir cuentas quienes prefirieron ignorar este continuo abuso de derecho frente a Iconos -empresa representada por De la Vega-, socio a quien únicamente se le ha permitido acceder a la Junta cuando su porcentaje accionarial, siempre según el libro de registro de socios, había quedado reducido a la mínima expresión».

«Como consecuencia de todo lo anterior, les reitero que la aprobación de cualquier acuerdo sobre ampliación de capital o préstamos convertibles con la concurrencia de acciones ya declaradas judicialmente nulas y de otras cuya nulidad se desprende directamente de la reiteranda sentencia constituye no solo una irresponsabilidad sino una flagrante vulneración de los derechos de voto que corresponden a mi representada, y que se hará valer a través de la correspondiente impugnación judicial en caso de aprobarse finalmente cualquier acuerdo que conduzca, a través de mayorías ficticias o abusivas, a una nueva laminación accionarial que en derecho le corresponde ostentar en la SAD a mi representada», concluye.

García de la Vega sigue así con la estrategia marcada en 2018, cuando fue expulsado del club pese a haber comprado las acciones a Raúl Moro. Este problema ha llevado al Real Murcia ha vivir judicializado. Ahora mismo está el club a la espera de que el Supremo decida sobre la ampliación de 2018, anulada por la Audiencia Provincial.