El deporte, en primera persona

"La lesión que he sufrido me ha abierto mucho la mente y ayudado a saber bien qué quiero"

La joven aguileña Alba Rey ha obtenido los mejores resultados de su carrera como tenista en el circuito profesional después de tener que pasar por el quirófano el pasado mes de mayo por una rotura de menisco interno

Alba Rey en un partido.

Alba Rey en un partido. / L.O.

Dioni García

Dioni García

Alba Rey García (Águilas, 29 de junio de 2002) ha vivido dos semanas espectaculares. Ganó su primer torneo profesional del circuito ITF15.000 en Valencia y fue finalista el pasado sábado en otro de la misma categoría. La joven jugadora, que está entrenada por Rubén Aguado y Jony Marín, sufrió en mayo una lesión que le tuvo apartada de las pistas de tenis muchos meses, pero ese tiempo en dique seco le ha servido para cambiar mentalmente.

¿El tenis fue el primer deporte de tu vida?

Fue el primero de todos porque yo siempre acompañaba a mi hermano al entrenamiento, que él empezó con fútbol y tenis, aunque acabó con la raqueta, y me llamó mucho la atención. Además, mis padres siempre han estado en el pádel y los deportes de raqueta, y por eso siempre lo he tenido como una prioridad.

¿Cuándo te diste cuenta de que podías tener una carrera en el tenis?

Pues sobre los 13 o 14 años, aunque ya llevaba muchísimo tiempo entrenando, pero fue a partir de ahí cuando vi que podía ser tenista.

¿Y qué ocurrió para llegar a ese punto?

Con 12 años nos quedamos campeones de España por equipos y fue una motivación que me impulsó bastante. Aparte, también empecé a viajar a torneos internacionales. Vi otro mundo, me gustó y eso me llevó a seguir con el tenis.

El tenis es excesivamente sacrificado, porque llegar es muy difícil.

Así es, todo deportista o tenista lleva un trabajo detrás. Todos tenemos que hacer un sacrificio que no se ve, incluso los mejores del mundo lo dicen porque solo si llegas al ‘top ten’ tienes un reconocimiento, pero desde muy pequeño hay que sacrificarse mucho y al ser un deporte individual, todo depende de ti.

¿A qué has tenido que renunciar para ser tenista?

He tenido que renunciar a salidas con los amigos, pero al fin y al cabo mi familia y mis amigos siempre han entendido que el tenis es mi prioridad. He renunciado, pero nunca me ha costado no poder asistir a un evento.

Pero alguien se habrá quejado de esas ausencias.

Siempre hay quien pregunta un poco más de la cuenta, pero hasta que no te metes en el deporte no sabes a qué tienes que renunciar.

Este año ha tenido una lesión. ¿Qué ocurrió?

Estaba jugando a finales de mayo en Barcelona y llevaba una racha muy buena. Me encontraba en uno de los mejores momentos de mi carrera tanto confianza como de juego. Estaba jugando en una pista rápida, hice un gesto que sabía perfectamente que no iba a acabar muy bien, y me rompí el menisco interno. A las dos semanas tuve que entrar en el quirófano para operarme.

¿Fue tu primera lesión?

La primera seria sí. Alguna vez he tenido lesiones de corta duración, pero no las considero como tal.

¿Y cómo recibiste esa noticia de tener que parar en un buen momento?

La verdad es que fue un momento duro, pero me abrió la mente, hizo darme cuenta qué quería en realidad, pero lo mejor era no pensar en ello y solo en recuperarme.

¿Fue dura la recuperación?

Fue todo bien. Ha sido bastante rápida gracias al trabajo de mis entrenadores, que siempre han estado ayudándome, el readaptador y el fisioterapeuta. Ha sido muy veloz por el trabajo que hemos hecho detrás.

¿Qué circunstancias se dieron para ganar su primer torneo?

Yo siempre que voy a jugar un torneo tengo en mente que puedo ganar o perder con cualquiera. Pero conforme iba avanzando la semana me iba encontrando mejor en la pista, con mucha confianza y creo que todas las ganas que tenía acumuladas de volver a competir me hicieron ganar. El parón me ha venido bastante bien para darme cuenta de qué quiero y esforzarme mucho más. Espero que poco a poco se vaya viendo todo el trabajo que llevo hecho.

¿Quieres decir que la lesión te ha ayudado a cambiar el chip?

Ha sido un punto de inflexión para bien, un impulso.

Es que avanzar en el ránking es muy difícil.

Siempre es complicado. Perdí ránking por la lesión porque tenía que defender puntos después, pero ahora, con este resultado, vuelvo a recuperar el puesto que tenía, pero el objetivo en este final de año no era otro que competir porque no sabía si me iba a recuperar a tiempo de la lesión. A partir de ahí, cuando empiece la próxima temporada, me marcaré unos objetivos, que se centrarán en mejorar puestos que me abran puertas para jugar torneos más grandes.

¿Cómo te sostienes económicamente?

Yo todavía no puedo decir que me dedico exclusivamente al tenis, pero tengo la suerte de que mis padres siempre me han estado ayudando y también los patrocinadores que he tenido a lo largo de este tiempo, a los que valoro mucho. El tenis, por desgracia, no es un deporte barato.

¿Os ayuda a los jóvenes tener ahora mismo a Carlos Alcaraz como número uno del mundo?

Depende. Hay gente que se lo toma como un referente y se puede crear unas expectativas falsas porque lo que ha conseguido Carlitos es increíble, pero no puedes pensar que con 19 años todos podemos jugar ese tipo de torneos, sino que tienes que seguir trabajando para conseguir un gran nivel. Depende mucho de la mentalidad de cada jugador, si se lo toma como una presión o una motivación.

Ha convivido con Carlos Alcaraz mucho.

He tenido la oportunidad de jugar muchas veces con él, de hecho somos muy buenos amigos, lo he visto crecer desde pequeño y siempre apuntaba maneras.

¿Y qué le ves de especial a Carlos Alcaraz?

Sobre todo que tiene mucha garra en la pista, que cada vez que juega se lo deja todo al margen del talento que tiene desde bien pequeño. Él se crece en la pista, cree mucho en él y sabe que es capaz de ganar a cualquiera.

¿También trabajas con un psicólogo?

En parte. El trabajo mental también lo hago con mis entrenadores de tenis, que siempre me han ayudado desde pequeña.

No parece que te afectara mucho la presión en la final que ganaste.

La final, entre comillas, fue fácil, pero también es cierto que mi rival tenía más presión porque está mejor en el ránking y era la favorita. Pero la presión siempre la tenemos presente tanto en el deporte individual como de equipo. La presión te puede pasar factura si te autopresionas demasiado, pero yo no la he sentido mucho porque lo único que he pensado ha sido en jugar y disfrutar, y eso ha venido motivado por la lesión que he sufrido, que me ha hecho ver la importancia que tiene la cabeza en el tenis. Me ha abierto mucho la mente y me ha ayudado a saber bien qué quiero.

¿Consideras que las mujeres están en inferioridad con respecto a los hombres en el tenis?

La verdad que no porque en el tenis los premios son iguales para hombres y mujeres, incluso considero que no es justo en un Grand Slam porque ellos juegan a cinco sets y nosotras a tres. Yo no tengo ninguna queja porque en el tenis existe igualdad.

Hace unos años, otra tenista murciana, me habló de los problemas que tienen con la gente que apuesta. ¿A ti te han llegado mensajes de ese tipo?

Sí. En algunas ocasiones, cuando termina un partido, lo primero que he visto en el móvil, haya ganado o perdido, han sido mensajes de gente que ha apostando. He recibido algún tipo de mensaje contra mí.

¿Y cómo lo denuncias?

Muchas veces nos hemos quejado y denunciado a la ITF, pero no nos han hecho mucho caso. Debería haber un control sobre la gente que está en los clubes. Hay un problema con las aplicaciones y es que los resultados llegan con unos diez segundos de retraso y siempre hay gente que acude a los torneos y genera problemas.

Veo que no ha cambiado.

No, esto no cambia, por desgracia sigue existiendo en los torneos.

Y los tenistas que menos dinero ganáis sois los que más sufrís este problema.

Exactamente. Recibir ese tipo de comentarios después de un partido es lo último que te esperas. Confío que en un tiempo esto se arregle.

¿Te has creado un escudo para que no te afecten esos mensajes?

La verdad es que sí. El primer mensajes lo recibió cuando tenía 15 años y me afectó un poco, pero conforme iban avanzando los torneos y veía que me pasaba en cada partido, empecé a no darle importancia. Me impactó muchísimo esa primera ocasión porque no te esperas terminar un partido y tener ese tipo de mensajes en el móvil. Conforme han pasado los años he decidido ignorarlos.

¿Quién ha sido tu espejo en el tenis?

He tenido varios. A nivel masculino siempre ha sido Nadal, y en chicas he ido cambiando porque siempre ha habido muchos cambios. De pequeña tenía como referentes a Sharapova y Serena Williams, y después a Muguruza, pero tengo muchos referentes.

Por lo que veo en las redes sociales eres coqueta.

Sí que lo soy. Y en las redes sociales hay que estar activa porque ayuda para conseguir patrocinadores. Pero intento controlarlo lo mejor que puedo.

¿Qué expectativas tienes de cara al año próximo?

Yo solo quería acabar compitiendo este año y jugar el máximo número de partidos. Ahora empezaré la pretemporada, me reuniré con mi equipo y hablaremos del año que viene, pero me centraré en el ránking e intentar llegar a mitad de año al top 500 y ver cómo acabo.

¿Quiénes conforman tu equipo?

Tengo a mis entrenadores de toda la vida, Rubén Aguado y Jony Marín, y como preparador físico a José Espinosa, con quien llevo desde los treces años. Es mi equipo desde que prácticamente empecé. Me siento muy arropada por ellos y el grado de confianza es bastante alto entre nosotros.