Si el Real Murcia fuese un equipo pequeño, recién llegado a la Primera RFEF y con objetivos de mantener la categoría, su partido de ayer frente al Castellón en Castalia sería suficiente pese a que el marcador le fue adverso. Pero como el Real Murcia está confeccionado para luchar por el ascenso, a nadie le puede valer lo de que los granas hicieron un partido serio, que se escapó por un gol de Óscar Gil tras el remate de un córner. Y es que, a lo único que optaron los de Mario Simón, por muy serios que se comportaran sobre el terreno de juego, fue al empate a cero. Un empate que se escapó por lo mismo de siempre, la mala defensa de una jugada de estrategia.

El Real Murcia pudo traerse de Castalia un punto en el bolsillo. Fue lo único a lo que optó un equipo de nuevo sin protagonismo en ataque y que cada jornada que pasa le pesa más la falta de futbolistas diferenciales para cambiar esos encuentros de máxima igualdad pero que se abren en los minutos finales.

Un Real Murcia poco diferencial

Pero cuando en la plantilla no tienes ni un delantero que meta goles y cuando tus fichajes diferenciales están en el banquillo por méritos propios pues solo te queda agarrarte a la seriedad para defender el mínimo premio, el de un punto que ni siquiera llegó. Porque en el minuto 81 el Castellón mandó a la lona a los murcianistas, y lo hizo de un modo que ya de tanto repetirse debería ser delito. Lo hizo en un saque de esquina lanzado por Cristian, que ya había intentado sorprender a Serna de forma directa, y rematado por Óscar Gil.

No es que el Castellón hiciera mucho más que los granas para llevarse el partido. De hecho, en la primera parte ni uno ni otro equipo fueron capaces de pisar el área rival. Ni una ocasión pudieron ver los aficionados que se dieron cita en Castalia. Y eso que Ganet tuvo dos faltas ideales para cambiar en un pispás y de forma fácil el duelo, pero nadie sabe lo que quiso hacer en el primer lanzamiento y en el segundo simplemente le regaló el balón al meta albinegro.

Ya, en la segunda parte, cuando llegó el momento decisivo, fueron los locales los que más ganas le pusieron, y eso que en el campo no contaban con su máximo goleador.

Sin Dani Romera, que finalmente no superó sus problemas físicos, los de Torrecilla fueron poco a poco golpeando al Real Murcia para ganar metros. Solo la madera evitó que Kandoussi abriese el marcador en el minuto 52, y aunque el Real Murcia respondía con un remate de Loren Burón que detuvo Alfonso Pastor, la sensación de desequilibrio siempre llegaba por el bando albinegro, al que además le salieron mucho mejor los cambios que a Mario Simón.

Porque con la entrada de De León, el Castellón ganaba electricidad en ataque, algo que no ocurría en el bando grana con la entrada de Pedro León por un Loren Burón que de nuevo fue insistente pero no decisivo. Regresaba el muleño, que volvió a ser suplente en una alineación donde solo Zeidane entró por Dani Vega, pero no fue la solución para un Real Murcia que se conforma con dar pases horizontales entre Ganet, Galindo y Julio Gracia como si eso ya asegurara sumar un punto en el casillero.

Pero a la espera que la FIFA premie el dar pases de medio metro, el Real Murcia no tiene ni verticalidad ni profunfidad. Y ayer se volvió a comprobar en un partido donde solo Arnau Solá lo intentó en la primera parte. Tampoco ayuda que no aparezca en la plantilla ni un delantero capaz de dar una alegría a la afición. Porque Miku, ayer fuera por lesión, ni está ni se le espera y porque con Andrés Carrasco tampoco cambia absolutamente nada. De ahí que dé un poco igual si hay o no un 9 en el campo. Y eso debió pensar Mario Simón cuando sacó al murciano para dar entrada a Dani Vega.

Pero cuando más cambios hacía Mario Simón para reactivar el ataque, más perdido se mostraba un Real Murcia que empezaba sufrir cada vez que el Castellón se acercaba a puerta. Se fueron librando porque los albinegros, sin Dani Romera, tampoco se aclaraban en ataque, pero no fue suficiente para sumar algo en Castalia.

Y es que, como siempre, el Real Murcia volvió a tropezar en la misma piedra de siempre, una piedra que no es otra que la de los saques de esquina. Decía Mario Simón después de que el Osasuna B les diera un baño en Nueva Condomina que no había que obsesionarse con los córner, pues parece que deberá cambiar de opinión el técnico murcianista si no quiere seguir regalando puntos.

Porque esas acciones por las que no hay que obsesionarse volvieron a costar caro al Real Murcia. No lo consiguió Cristian en un saque olímpico con el que intentó sorprender a Serna, pero sí obtuvo premio a la siguiente, cuando metió un balón para que Óscar Gil pusiese un 1-0 que duele doble o triple. Porque los granas se quedaron sin puntos a la vez que ven como los orellut se escapan al frente de la tabla -ya están a ocho puntos-. Y no solo eso, es que se empeñan de alargar ese estado de tensión instalado en Nueva Condomina y que puede volver a convertir el encuentro del próximo domingo ante el Alcoyano en una trampa.

Simón: «Es injusto no haber sacado ningún punto en este partido»

«Dolido». Así se marchó Mario Simón de Castalia, donde el Real Murcia cayó derrotado ante el líder Castellón. Y es que el técnico grana considera «injusto» que su equipo se fuera de vacío. «Hemos hecho una buena primera parte, ya en la segunda nos ha faltado valentía. Pero el encuentro estaba controlado e incluso hemos tenido la ocasión de Loren. Es un jarro de agua fría el perder en una acción a balón parado», explicaba el madrileño en rueda de prensa.

Al ser cuestionado por ese córner, decía que «son acciones del juego. Mala suerte. No se le puede achacar nada al equipo, es acierto del rival», comentaba, añadiendo que a sus jugadores solo les puede dar «enhorabuena». «Hemos hecho un gran partido en el campo del líder, y por eso me voy dolido, porque salir de aquí sin nada es injusto».

Considerando que el encuentro «fue de otra categoría por el ambiente», Simón insistía en que «es una lástima no llevarnos nada de aquí», y es que según el técnico «nunca ha habido sensación de haber sufrido».

El técnico grana apostaba por Zeidane de inicio y salió contento con la actuación del sueco. «Me da la sensación de que ha generado peligro. Encaraba y se iba. Hay que ponerle una nota alta porque ha estado a un buen nivel en un partido complicado», comentaba.

«Una derrota no refuerza, pero se ha demostrado que el equipo tiene personalidad y que ha hecho muchas cosas bien hoy. Seguramente nos podíamos haber llevado algo de aquí», insistía. Por último comentaba que no sabe si Miku podrá llegar al siguiente partido ante el Alcoyano.