Con el número uno de la ATP como una meta cada vez más posible, Carlos Alcaraz, que venció este lunes en octavos del Abierto de EE.UU. a Marin Cilic, aseguró que intenta abstraerse de esa hipótesis que él todavía ve muy complicada.

"Lo veo muy lejos. Aunque creo que me quedan dos o tres partidos, lo veo totalmente lejos", indicó el español en rueda de prensa al subrayar que "intenta no pensar" en ponerse al frente de la clasificación mundial y recordar además que los duelos que le quedan para ello son "de alto nivel".

"Estoy enfocado en los cuartos de final", aseguró.

El murciano, en la cuarta posición de la ATP con solo 19 años, sufrió pero finalmente se impuso a Cilic por 6-4, 3-6, 6-4, 4-6 y 6-3 en un apasionante y épico partido que duró 3 horas y 54 minutos y que acabó a las 2:23 horas de la madrugada.

Alcaraz mantiene vivo así el sueño de lograr su primer Grand Slam y también el de salir de Nueva York como nuevo número uno del ránking mundial. Con la eliminación de Rafa Nadal en octavos, Alcaraz sería número uno ganando la final si la jugara contra Casper Ruud (séptimo del mundo) o quedando subcampeón siempre que el noruego no se llevara el título.

Si Alcaraz o Ruud no cumplen con su parte, entonces será Nadal el número uno en sustitución del ruso Daniil Medvedev.

Al margen de los cálculos para la clasificación de la ATP, Alcaraz tendrá otra prueba exigente en cuartos ante el italiano Jannik Sinner, número 13 del mundo y que venció al bielorruso Ilya Ivashka en cinco sets.

Sinner ha derrotado a Alcaraz en las dos ocasiones en que se han enfrentado este año: la final de Umag y los octavos de Wimbledon.

"Le tengo ganas (...). Soy un chico competitivo. Tengo ganas de volver a enfrentarme a él, de demostrar mi nivel y mi juego y de volver a por todas. Ojalá a la tercera vaya la vencida", dijo Alcaraz, que buscará ante Sinner sus primeras semifinales en un Grand Slam.

Sobre su extenuante duelo ante Cilic, Alcaraz dijo que no recordaba haber acabado un partido tan tarde y aseguró que, tras perder el cuarto set, la clave para llevarse el quinto fue "creer en uno mismo".

"Sabía que iba a tener mis oportunidades, que tenía que estar ahí, empujando todo el rato, manteniendo el nivel", explicó.

Además, Alcaraz enfatizó que, ganar un partido tan duro como este, le da "confianza" de saber que se encuentra bien "tenísticamente, físicamente y mentalmente".

El joven jugador dio las gracias a todos los fans neoyorquinos que se quedaron hasta bien entrada la madrugada para apoyarle en las gradas.

"Sin ellos no hubiera sido posible ganar hoy", sostuvo.