Asier Martínez sigue haciendo historia y acaba de proclamarse campeón europeo de 110 metros vallas este miércoles en los Europeos de Múnich para aupar a España a la segunda plaza del medallero con seis medallas y dos oros tras el de Miguel Ángel López en 20 kilómetros marcha.

El navarro llegaba a tierras bávaras como gran favorito al título tras su épica medalla de bronce en los recientes Mundiales de Eugene, donde aprovechó la descalificación de Devon Allen y la lesión del campeón olímpica Braithwaite para colgarse una medalla que solo tendría parangón en la plata del hispanocubano Orlando Ortega en Río 2016, el oro de Javier Moracho en los Mundiales bajo techo de Madrid y el título de la hispanonigeriana Glory Alozie también en el Olympastadion de Múnich en los Europeos de hace 20 años.

Cuarto en los Mundiales bajo techo de Belgrado el pasado invierno y sexto en los Juegos de Tokio, el pamplonica demostró en las semifinales que no le puede nunca la presión y se impuso en su semifinal con 13,26, muy cerca de su marca personal (13.17) y permitiéndose el lujo de llegar mirando a su rival.

En la final más emocionante de la historia, el discípulo de François Beoringyan ha realizado la mejor carrera de su vida para colgarse el oro con 13.14, tan solo una milésima más rápido que Martinot-Lagarde. A sus 23 años, Asier Martínez ya es una de las grandes estrellas del atletismo español.