La tanda de penaltis dictó sentencia en la I edición del Trofeo BeSoccer, que ha servido como presentación del UCAM Murcia en su estadio antes de que comience la liga. Los universitarios se impusieron a El Palo desde los once metros, aunque en los noventa minutos reglamentarios ningún equipo pudo romper el empate a cero inicial. Tuvo muchas dificultades el equipo de Molo para buscar soluciones en tres cuartos de campo, mientras que el equipo andaluz se iba creciendo poco a poco y llegando con claridad a los dominios de Zorro, que fue el mejor del partido para los universitarios. Una prueba que, a buen seguro, producirá más dudas que certezas a Molo.
La primera parte no fue muy fluida por parte de ningún equipo. Ninguno de los dos consiguió imponer su idea sobre el otro y no pudieron abrir la lata. El UCAM Murcia dominó mucho el esférico, pero su sistema se cortocircuitaba cuando se aproximaban a zona de tres cuartos de campo. Tan solo Mario Abenza, con su clásica conducción rompiendo líneas, conseguía crear peligro desde fuera del área.
Las acciones más peligrosas para el UCAM llegaban a balón parado. Manu Ramírez demostró que tiene una zurda de superior categoría. Cada centro que ponía era oro. Encontraron remate Abenza, que se fue por muy poco, y Yasser, que estuvo a punto de llegar solo en el segundo palo.
Los de Molo, sin mucha fluidez en su parcela ofensiva, estaban siendo superiores a un equipo de inferior categoría. Sin embargo, el Palo, al ver que su rival no culminaba el gol, se fue creciendo y subiendo sus líneas de presión. Empezaron a presionar mucho más arriba y a robar más balones. Con una conexión de dos pases de El Palo, el entramado defensivo del UCAM Murcia se venía abajo. De hecho, las dos ocasiones más peligrosas de este periodo fueron por parte de los visitantes. En la primera, Zorro sacó un brazo a un disparo a bocajarro que iba directo a la escuadra. La segunda, sacó un mano a mano a Ito con una parada más propia de balonmano. Zorro fue el mejor de la primera parte. Y eso, ante un equipo de inferior categoría, no es una buena noticia para el UCAM.
La peor noticia de la primera mitad fue sin duda el golpe que se llevó Abenza en la cabeza. El centrocampista comenzó a sangrar abundantemente en la cabeza y tuvo que irse al hospital, aunque se encuentra en buen estado, fue por precaución.
La segunda parte comenzó de una manera similar a la de la primera. Mucho control de balón, pero pocas ideas cerca del área. El Palo seguía agazapado esperando su ocasión, sin romper mucho su esquema y luchando con mucha más intensidad en cada balón dividido. Dejó una buena imagen el equipo andaluz.
Comenzó el carrusel de cambios por parte de Molo. Dio entrada a Andúgar, Vicente Romero, Pedro Torres y Chuma, pero sus cambios no cambiaron mucho la versión del equipo que se estaba viendo.
Tuvo momentos buenos El Palo, alternando control del esférico con repliegues defensivos. Volvió a inquietar a Zorro a balón parado, con un disparo de libre directo de Sergio Esteban que detuvo el canterano del UCAM a mano cambiada.
Finalmente, nadie pudo romper el empate a cero inicial y el trofeo se tuvo que resolver desde el punto de penaltis. Se lo llevó el UCAM después de que José Fran, Sergio Cortés, Chuma. Vicente Romero y Manu Ramírez acertaran desde los once metros.
