Un mal final para una mala temporada. Así se podría resumir el último encuentro del UCAM Murcia en Segunda RFEF, que ante su afición (la poca que se congregó en la Condomina) no fue capaz de cuajar un buen partido ante el Barça B. El filial blaugrana fue superior a los universitarios en todo momento. Pedro López salvó bajo palos al UCAM Murcia de una goleada.
No pintaba nada bien el partido desde el inicio para un UCAM Murcia que, contagiado por la desidia que producía una Condomina prácticamente vacía, ofrecía dos recuperaciones en campo contrario y una aproximación de Xemi Fernández que resultaron ser un espejismo de lo que se vería en la primera parte, pues en el minuto 5, una buena internada de Ez Abde en el área universitaria, en la que dejó atrás a dos defensas, acabó con el primer tanto del filial blaugrana.
El Barça B siguió apretando en los minutos siguientes al gol, consciente de la debilidad de los universitarios a la hora de defender. Tan solo Liberto por banda izquierda fue capaz de inquietar mínimamente a los visitantes, pero sus arrancadas, o bien se perdían por línea de fondo, o acababan con centros mansos a las manos del guardameta culé.
Los visitantes seguían triangulando a placer en la medular, ante una presión universitaria a la que le faltaba un punto de intensidad. Los de Aira intentaron conseguir el empate, de nuevo en botas de Liberto, pero sus disparos se marchaban cruzados de la portería visitante. También Xemi Fernández, tras una buena combinación en la frontal con Fullana, se plantó solo ante Álex Ruiz, pero no acertó a disparar. La primera mitad concluyó con una buena mano de Pedro López a disparo de Ghailan para impedir que los blaugranas ampliasen su ventaja en el marcador.
Tras el paso por vestuarios, los de Aira apretaron para incomodar al Barça B, y por unos momentos pareció funcionar. Pero todo fue un espejismo, porque de las pobres intentonas locales se pasó a las claras oportunidades visitante, y fue entonces cuando apareció la figura de Pedro López, quien salvó hasta en tres ocasiones a los suyos. El UCAM Murcia comenzó a creer que podía sacar al menos un empate que casi llega en botas de Liberto, quien gozó de una oportunidad clarísima que fue desbaratada por el portero del filial culé.
Los últimos minutos se volvieron locos, pues Gabri lograría enganchar desde la frontal del área un buen balón que ajustó al palo para hacer el empate, pero a la jugada siguiente, Mortimer, también con un derechazo desde fuera del área, conseguía devolver a los suyos la ventaja en el marcador.
Punto y final a una temporada muy mala del UCAM Murcia, que tras consumar su descenso, no ha sido capaz de sacar orgullo para brindar a su afición una victoria, por muy innecesaria que esta fuese.