Se jugaban mucho Mar Menor y Atlético Levante en su duelo en el Pitín. Mientras que el conjunto marmenorense tenía la oportunidad de seguir dependiendo de sí mismo para jugar el play off de ascenso, los granotas luchaban por la permanencia. El partido, vibrante desde el minuto uno, concluyó con un reparto de puntos (1-1) que no termina de satisfacer a ninguno de los dos equipos.

Los primeros veinte minutos de encuentro fueron para el equipo dirigido por Chema Sanz, que aunque se hizo con el dominio del esférico, no consiguió inquietar la portería defendida por Facu Ackermann. A partir de ahí, el Mar Menor se asentó en el terreno de juego para, poco a poco, trenzar jugadas de peligro. Así, en el minuto treinta, Peque se saca un lanzamiento que se marcha rozando el poste, y tan solo dos minutos después, es Molinero quien sirve un balón medido a Titi, cuyo remate fue rechazado y recogido por Cifu, quien con todo a su favor para abrir el marcador se llenó de balón y perdonó.

El conjunto dirigido por Javi Motos había conseguido sacudirse el dominio visitante, pero, pese a mandar en la posesión, sufrió en la única llegada con peligro de los visitantes, al contragolpe, el mazazo de los valencianos. Jorge Padilla se aprovecharía de un fallo de la zaga local para batir a Ackermann y establecer el 0-1 en el marcador. La réplica llegaría cinco minutos después en botas de Morros, quien en un libre directo obligó a Campos a hacer una gran estirada. En los minutos finales de la primera mitad, el Mar Menor se llevaría otro golpe con la más que rigurosa expulsión, por doble amarilla, de Titi, que dejaba a su equipo en inferioridad numérica con toda la segunda mitad por delante, y con el objetivo de darle la vuelta al partido.

Tras el paso por vestuarios, el Mar Menor salió decidido a encontrar el gol del empate. El técnico puentetocinero dio entrada a Alberto Vázquez, único san javiereño de la plantilla, para meter algo más de pólvora al ataque costero. El joven centrocampista revolucionó el partido, dándole aire fresco a un Mar Menor que lo recibió con los brazos abiertos. Apenas un minuto tras su entrada al campo, el propio Vázquez gozó de una buena ocasión para igualar el partido, pero su disparo no resultó del todo acertado.

El Mar Menor buscaba con ahínco el empate, y este llegaría tras una gran jugada en la que Silvente fue derribado dentro del área, siendo objeto de una pena máxima que el árbitro no dudó en señalar. Molinero se ajustó el brazalete de capitán, sacó los galones a pasear y agarró el balón con decisión para, desde los once metros, ajustar el lanzamiento a la derecha del portero visitante y poner el 1-1 en el marcador.

Los últimos 20 minutos, debido a que a ninguno de los dos equipos le valía el resultado, fueron frenéticos. Las ocasiones se sucedían de uno y otro lado, pero tanto los porteros como las defensas estuvieron los suficientemente acertados como para certificar un reparto de puntos que no deja satisfecho a un Mar Menor que ya no depende de sí mismo para entrar en el play off de ascenso.