Carlos Alcaraz ha vuelto a dar su mejor nivel. Después de la eliminación en Montecarlo en primera ronda ante Korda, y su estreno con altibajos ante Son woo Kwon, el tenista murciano ha vuelto a mostrar su mejor faceta, la que le hizo reinar en el Masters 1.000 de Miami. Tuvo que ser con una jornada de retraso, pues las lluvias intercedieron en la jornada de ayer en Barcelona y retrasó casi por completo la jornada y también el partido de Alcaraz contra Munar.

El tenista de El Palmar barrió a Jaume Munar en poco más de una hora (6-3, 6-3) desplegando un juego soberbio. Fue mejor que el mallorquín desde el inicio del partido en todos los aspectos del juego; en la red, en el fondo de pista, en el saque y en el resto. Dominó con claridad el juego desde el principio y desquició a un Jaume Munar que no pudo vencer al murciano en el tercer duelo en ATP entre ambos. En los dos duelos anteriores, se repartieron las victorias.

Comenzó muy serio el partido Alcaraz, que tan solo tuvo que romper el servicio de Munar una vez en el primer set. En el resto de la manga, se dedicó a asegurar su saque. Y lo hizo con mucha solvencia, pues ganó el 81 % de sus primeros servicios y el 88 % de segundos.

Al igual que ante Kwon, las sensaciones del primer set fueron inmejorables. Pero esta vez, no se fue Alcaraz del partido. Ante el surcoreano dejó de sentir la pelota y cedió en el segundo set. Aprendió la lección el murciano para su segundo encuentro en el Godó y pocas opciones le dio a un Munar desesperado y con gesto serio todo el partido. A las primeras de cambio, le volvió a hacer un break que ponía a Carlos 2-0 por delante. Y de la misma manera que en la manga anterior, supo controlar el partido y dominar desde su servicio. No le hizo falta más. Dejó puntos que se convertirán en highlights del torneo y puso la puntilla a Munar rompiéndole de nuevo el saque para poner el 6-3 definitivo.

Ya espera a su próximo rival en cuartos de final de Barcelona. Su próximo rival saldrá del ganador del Tsitsipas - Dimitrov que se juega esta tarde.