Carlos Alcaraz volvió a la senda de la victoria en su debut en el Conde de Godó de Barcelona. Se impuso con un poco más de sufrimiento a Son Woo Kwon en tres mangas (6-1, 2-6, 6-2) en un encuentro bastante irregular por parte del murciano, ya que mostró un nivel impresionante en el primer set y se fue completamente en el segundo, donde el surcoreano consiguió endosarle seis juegos consecutivos. Finalmente, enderezó la faena en el tercer set y se medirá a Jaume Munar en octavos del torneo.

Carlos Alcaraz comenzó como un tiro. Aún tenía en mente el partido ante Sebastian Korda en su estreno en Montecarlo y quería salir a por todas, con ganas de demostrar en Barcelona. El tenista de El Palmar empezó el partido sin dar ninguna opción a Son Woo Kwon, número 71 del mundo. Y es que, Alcaraz no tuvo piedad del surcoreano y lo aplastó en el primer set (6-1) en tan solo 27 minutos. Kwon, que comenzó el partido con un juego muy defensivo, pronto se dio cuenta de que tenía que cambiar de estrategia, pero de poco le valió en esa manga.

Carlos Alcaraz lo vapuleó desde todas las posiciones. Fue mejor al saque, al resto, en el fondo y en la red y el surcoreano no puso ninguna resistencia. Cometió muy pocos golpes y ganó el 94 % de sus primeros servicios, lo que le permitió mandar siempre.

Kwon se rebela

Todo parecía indicar a una tarde plácida de tenis para Carlos Alcaraz, ya que la superioridad en el primer set fue aplastante. Pero no fue así, a pesar de que también comenzó de la mejor manera posible el murciano, con 2-0 en el segundo set. Contra todo pronóstico en ese momento, Kwon se vino arriba y comenzó a culminar su particular remontada. Del 0-2 en el segundo set, se pasó al 6-2 en un abrir y cerrar de ojos. Seis juegos consecutivos inundaban de dudas al joven murciano, que dejó de sentir la raqueta en todo el set. En la segunda manga, el surcoreano consiguió desquiciar a Alcaraz, que falló todo lo que no hizo en el primer set. Juan Carlos Ferrero observaba con nerviosismo y un semblante más que serio la mala actuación de un Alcaraz demasiado precipitado.

Son Woo Kwon forzó la tercera manga ante la sorpresa de todos los asistentes por méritos propios. Pero la gasolina le dio hasta ahí, pues Carlos Alcaraz volvió a ser muy superior al número 71 del mundo. Le devolvió el 6-2 del segundo set con un tenis mucho más sólido, aunque con muchas dudas con el servicio, y se desquitó aliviado con un gran grito de rabia.

Munar, difícil rival

El próximo rival de Alcaraz será Jaume Munar en octavos de final, un rival al que ya se ha enfrentado en dos ocasiones en su carrera ATP con un balance de una victoria para cada uno. El balear le venció en Marbella (6-7, 4-6) y el murciano se llevó la revancha en Río de Janeiro (6-2, 2-6, 1-6).