Carlos Sainz ha acabado lógicamente "muy decepcionado" después de un fin de semana de pesadilla en el GP de Australia de Fórmula 1. Si en clasificación, el sábado, todo salió mal, la carrera ha sido aún peor. De hecho el madrileño apenas ha estado dos vueltas en pista, antes de trompear y terminar en grava de Albert Park , poniendo fin a una racha de 17 carreras en los puntos. Después de subir al podio en las dos primeras carreras de la temporada, Sainz buscaba la primera victoria de su carrera deportiva en la F1 pero nada ha salido según lo planeado.

"Hemos vuelto a tener problemas similares con los interruptores del coche, como ayer. Tuvimos que cambiar el volante justo antes de la salida, lo que significaba que este no estaba bien configurado para la salida", ha explicado Carlos.

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"Por ello, desafortunadamente nos quedamos bloqueados en la salida. Después hice un trompo con el neumático duro, y luego, con las prisas de querer volver a pista, cometí un error. Necesito ser duro conmigo mismo porque es un error de piloto. Ha sido un fin de semana para olvidar, todo ha salido muy mal", ha reconocido. "Obviamente, todavía estamos conociendo estos neumáticos y claramente el compuesto más duro este fin de semana ha sido muy complicado de gestionar en las primeras vueltas, justo cuando tenía que empujar más. Es una conclusión fácil el hecho de que no debería haber presionado tanto, que debería haber sido paciente. Pero al mismo tiempo, tampoco fuimos perfectos como equipo. Tuvimos muchos problemas, el anti stall, percances en clasificación y más cosas que te ponen bajo presión", ha advertido.

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Con su compañero Charles Leclerc en racha y liderando el campeonato, Sainz se siente muy presionado por su situación aunque confía en remontar en las siguientes citas del calendario. Tiene coche y talento para seguir peleando por su sueño.

"Debo aprender de esto para volver más fuerte. Está claro que el coche es rápido, este fin de semana me encontraba un poco más cómodo y eso hay que aprovecharlo. Todavía quedan 20 carreras por delante, queda un mundo, pero hay que intentar ser más perfectos", ha cerrado Sainz, que dentro de dos semanas llegará al Gran Premio de Emilia Romagna tercero en la general del campeonato con 33 puntos, a una distancia ya considerable respecto su compañero Leclerc que ya suma 71.