El UCAM Murcia estará abierto hasta el último día de mercado a la llegada de nuevos fichajes que mejoren la cara de un equipo que en la primera vuelta de la competición se ha metido en un lío. En puestos de descenso, los universitarios abrieron la ventaja de fichajes con los deberes hechos. Ya son tres refuerzos los que han aterrizado en La Condomina. Teko regresa para apuntalar la banda derecha, Rubén Mesa eleva el cache de la delantera y Raúl Palma llega para aumentar las alternativas de Salva Ballesta en el centro del campo.

Pero con esas tres incorporaciones no se ha cerrado el mercado. En el UCAMMurcia siguen trabajando para contratar a un central, y para hacer hueco a ese nuevo jugador, en el día de ayer la entidad universitaria hizo oficial la salida de Admonio. El de Guinea Bissau, que vestía la elástica azul y dorada desde septiembre de 2020, se marcha cedido al Linares.

La salida de Admonio era un secreto a voces, y es que el jugador de 28 años no entraba en los planes de Salva Ballesta. Si con Salmerón empezó la liga acumulando minutos, a partir de la jornada nueve empezó a desaparecer de la alineación. De hecho, no había jugado ni un solo minuto en los últimos cinco encuentros ligueros -ante el Villarreal B y frente al Cornellá no entró ni en la convocatoria-.

Con la salida de Admonio, el UCAM sigue haciendo hueco en su plantilla para nuevos fichajes. Los universitarios tienen como prioridad la contratación de un central que apuntale una línea que no está dando el nivel esperado. Pero pueden haber más sorpresas. Atento al mercado, Pedro Reverte también está mirando otras opciones ofensivas. Uno de los nombres que aparece en los despachos de La Condomina es el de un viejo conocido de la afición universitaria. Isi Ros, al que el Atlético Baleares ha abierto la puerta, ha recibido una oferta para volver al UCAM. El murciano también cuenta con una propuesta del Real Murcia.

Parece que ambos clubes vuelven a cruzarse para la contratación de un jugador.