El STV Roldán va a despedir el año con un amargo sabor de boca tras no poder hacerse con la victoria en su último choque antes del parón por navidad. Las pachequeras cayeron por la mínima en casa del Pescados Rubén Burela FS (1-0), el cual despide el año de la mejor manera, siendo el segundo clasificado en la Primera División de fútbol sala femenino de España y tras haberse proclamado campeón de Europa.

Para el conjunto murciano no ha sido su mejor arranque de liga. Esta primera mitad de campeonato ha estado repleta de altibajos al no acabar de encontrar esa puntería de cara al gol que les ha penalizado mucho y les ha hecho dejarse muchos puntos por el camino. Las numerosas lesiones también han condenado al equipo al no disponer de todas sus jugadoras y en varias ocasiones han tenido que subir a jugadoras del filial que, en cualquier caso, han ofrecido un notable rendimiento pese a su inexperiencia.

El entrenador, Joaquín Peñaranda, pese a no obtener los resultados esperados, ha sabido establecer un buen sistema de juego, con una defensa bastante sólida. Así se ha podido ver en numerosos encuentros donde el STV, aunque no se llevase la victoria, ha empatado a uno o ha caído derrotado por la mínima.

Al STV Roldán le van a venir bien estas semanas de descanso para poder aclarar ideas, analizar esta primera mitad del campeonato y saber qué aspectos tiene que mejorar con urgencia. Las murcianas necesitan empezar a tener un olfato goleador y dejar de perdonar ocasiones, que en cada partido son numerosas de las que disponen, pero que acaban en nada. En muchas ocasiones, en vez de fusilar la portería rival, en algunas jugadas las jugadoras deciden dar un pase extra, totalmente innecesario, o hacer otro regate que acaba con robo de las contrarias.

Además de esa ausencia goleadora, el club roldanense no ha tenido mucha fortuna con las lesiones. Cuatro han sido las bajas que ha arrastrado el equipo en lo que llevamos de campaña. El caso de Lola Martínez ha sido el más grave, ya que se lesionó a principios de temporada y no podrá volver a jugar hasta la siguiente campaña. Junto a esta lesión se han dado otras como Noelia Montoro, que también estuvo de baja durante unas semanas por una elongación G1 y una microrrotura en el isquio; Andrea Marín, que sufrió un esguince con distensión de los ligamentos que la dejó un mes y medio de baja; y la última mala noticia para el STV llegó por Marta Pelegrín, quien sufrió una lesión en el menisco de su pierna izquierda. La buena noticia para las pachequeras ha sido la recuperación de Mayte Mateo y Toñi. Ambas jugadoras sufrieron lesiones de gravedad que las dejaron mucho tiempo fuera de las canchas, pero ya se encuentran a plena disposición de Joaquín Peñaranda.

Al STV Roldán le espera nada más volver de las vacaciones los octavos de final de la Copa de la Reina frente a La Algaida. Estas semanas de descanso le van a venir bien a las murcianas para mentalizarse de cara al duelo copero y para afrontar con otra cara el siguiente tramo de la temporada.