Pedro Acosta, campeón del Mundo de Moto3, ha concluido sus primeros entrenamientos sobre la Moto2 con la que competirá el próximo año en el Mundial, con buenas sensaciones. “En general, me sentí muy bien durante estos dos días de pruebas, especialmente durante el segundo. Nuestro único objetivo aquí era ganar experiencia y poner kilómetros a bordo de la Moto2, ya que tenemos mucho que aprender. Estoy contento con el trabajo que hemos hecho y el equipo hizo todo lo posible para que me sintiera cómodo desde el primer momento. Ahora es el momento de descansar y entrenar para fortalecerse”, ha manifestado el piloto de Mazarrón en unas declaraciones distribuidas por el Team Ajo, con el que seguirá competiendo en 2022.

No hubo cronometraje para los pilotos participantes en estos entrenamientos en la segunda jornada, pero en la primera el murciano acabó con decimotercer registro, a menos de medio segundo de su compañero de equipo, Augusto Fernández. Además, en el circuito Ángel Nieto se ha visto por primera vez al murciano con el dorsal que lucirá el próximo año, el 51, con el que rendirá homenaje a su preparador, Paco Mármol.

Acosta se marchará ahora de vacaciones con la intención de desconectar del ajetreado final de temporada que ha vivido, con numerosos actos después de proclamarse campeón en Portimao. Ahora llega el momento del trabajo físico y de seguir entrenando. Hasta el próximo 22 de febrero del próximo año ya no se volverá a subir a la Moto2.