Pedro Acosta demostró ayer ser humano. Tras hacer historia con la consecución de su título en el Mundial de Moto3, el piloto de Mazarrón de desmoronó. Todos los nervios de las últimas semanas florecieron tras la entrada de meta que le afianzaba el tan ansiado campeonato. Lágrimas de alegría soltó la joven promesa de tan solo 17 años al haber hecho historia.

Nada más bajarse de la moto, las primeras palabras de Acosta fueron de agradecimiento: «No puedo decir mucho. Me he tirado la última vuelta llorando. Solo puedo dar las gracias a todos los que me han apoyado. Mi equipo ha sido como una familia y me han dado mucho. Agradezco a las personas que en la sombra me han apoyado en la sombra. Esto va por ellos», explicaba Pedro Acosta.

Ya en zona mixta, respondió a varias cuestiones a DAZN, televisión que tiene los derechos de MotoGP en España. Al ser felicitado por su campeonato del mundo, Acosta se mostró incrédulo. Como si no hubiera sucedido: «Suena fuerte que sea el campeón eh. Qué quieres que te diga, si me he tirado la vuelta de honor entera llorando», reía entre lágrimas.

El mazarronero quiso explicar el curso cíclico que empezó con los tests de Portimao, justo donde se proclamó ayer campeón del mundo: «Hemos acabado el trabajo que empezamos en los tests de principio de año. Hace menos de un año que me quedé sin equipo y... (echa a llorar). Solo puedo agradecer a Red Bull y KTM porque confiaron en este niño que parecía que nunca iba a llegar», agradecía de nuevo Acosta.

«Me he tirado la vuelta de honor entera llorando. Suena fuerte que sea el campeón del mundo», desvela

La temporada se le ha hecho larga al joven piloto. Y es que Foggia, desde hace unas semanas, venía recortando puntos a Acosta de una manera considerable. No ha conseguido mantener el nivel que mostró a mitad del curso, pero al final, el colchón de puntos que recaudó ha servido para acabar líder: «No sentía nada. Yo solo iba a las carreras a ver si salía bien o mal, a aprender. Por suerte, ha ido bien y tanto Foggia como yo lo merecíamos, pero ha caído de nuestro lado», afirmaba. «Cuando acabó la carrera he sentido que había acabado un año duro. En las últimas carreras sentía ya muchos dolores y dificultades. Me costaba con el peso y la estatura, iba un poco al límite. Hemos acabado un año, pero en dos semanas empezamos otro. En la segunda parte de la temporada ya se me hizo duro. La gente desde fuera no lo ve, solo los que estamos dentro», exponía. Y es que, Acosta está ya entrenando su cuerpo para Moto2, categoría en la que estará el año que viene, y que le ha hecho tener dificultades con una moto tan diferente como la Moto3.

Sobre los más que normales nervios que debió experimentar, Acosta volvió a ponerse la coraza y sorprendió a todos: «No me he puesto nervioso nunca. Al final, si no ganaba, siempre aprendía. Si alguien tenía que creer en mí, ese era yo. No permití que nadie me metiera cosas en la cabeza y así ha sido», afirmaba confiante.

«Murcianos, va para vosotros»

El padre de Pedro Acosta no escondió la felicidad que le ha dado el título mundial de su hijo. No le ha importado hacerse a un lado para ceder el protagonismo a su hijo. «Pedro Acosta ya es él. Yo ya solo soy el padre», reía.

Pedro Acosta Sénior también tuvo palabras para toda su tierra: «Mazarroneros, murcianos y españoles, somos campeones del mundo», decía orgulloso.

Aki Ajo: «Ha sido como un sueño hecho realidad»

Las felicitaciones no se han hecho esperar para Pedro Acosta después de haber conseguido el Mundial de Moto3. Han sido muchas las personalidades del mundo del deporte, los que han querido arropar al murciano en uno de los momentos más felices de su vida. No ha faltado la felicitación de Aki Ajo, gerente del Ajo Team al que pertenece Acosta. «La historia de Pedro este año ha sido como un sueño hecho realidad. Llegar a la categoría, ganar tantas carreras como ha ganado y terminar llevándose el título con estilo como lo hizo hoy en Portugal, es algo increíble. Fue una carrera loca y muy emocionante. Estoy feliz y orgulloso de él, nuestros patrocinadores, nuestro gran equipo y todos los que nos rodean. Estoy muy agradecida», alababa la gerente.