Cuando parecía que lo único bueno del descenso a Segunda RFEF era que por fin se iba a ver a un Real Murcia dominador en la clasificación, solo han bastado ocho jornadas para que se confirme la mediocridad en la que vive instalado el club murcianista desde finales de 2018. Si hoy echan un vistazo a la clasificación del Grupo V de la cuarta categoría del fútbol español, no verán al Real Murcia liderando la tabla. Tampoco en el segundo puesto o en el tercero. Ni presionando al líder. Si hoy se interesan por cómo van los granas, tendrán que bajar la mirada hasta la octava posición para encontrar a un equipo que, al igual que los cangrejos, avanza para atrás en vez de ir hacia adelante.

Ganet se toca la oreja en la celebración del gol que supuso el empate. | FRANCISCO CALABUIG/SPD

Porque el Real Murcia que debe dominar en su grupo y que tiene que luchar por ese primer puesto que va acompañado por el premio del ascenso directo sigue dejando pasar las jornadas sin destacar en nada. No cambiaron las cosas en su visita al Atlético Levante. Completó la octava jornada sin saber lo que es ganar lejos de casa. El gol de Ganet en el minuto 73 solo sirvió para rescatar a un conjunto grana que cada semana que pasa anda más perdido en el centro del campo, y sin nadie que lleve la manija, da igual que Mario Simón acumule efectivos arriba, porque el resultado es el mismo o peor.

Ni las críticas acumuladas después de los pinchazos frente al Socuéllamos y al Pulpileño hicieron efecto en los jugadores del Real Murcia. Sus diez primeros minutos ante el filial levantinista fueron completamente para olvidar.

Comenzó el Atlético Levante con más garra, brío y entusiasmo, moviendo la pelota con rapidez ante un Real Murcia con aplomo, pero sin demasiada prisa en manifestar sus intenciones. Y mientras los murcianistas buscaban el manual de instrucciones, el equipo granota ya había puesto a funcionar su maquinaria ofensiva con avisos de Beni y Pubill. Sería Padilla poco después el que haría trabajar a Serna. El Levante se acercaba cada vez más y mejor a la portería murcianista. Tanto así que solo un minuto después, el propio Padilla inauguraba el marcador tras una asistencia de Alex Cerdá.

Andrés Carrasco, suplente

El tanto que adelantaba a los locales hacía que los aficionados señalasen directamente al banquillo. Allí estaba Mario Simón, que no da con la tecla, y allí también estaban Andrés Carrasco y Ganet, los ‘castigados’ en este primer bache que viven los murcianistas.

Si la suplencia del segundo se pudo deber al cansancio que acumula después de varios viajes con su selección; la no presencia en el campo del ‘9’ no la entendió absolutamente nadie. El delantero murciano pagaba los platos rotos mientras que Fran García, Dani García, Julio Gracia y Juan Fernández, futbolistas que son los que tienen que dar asistencias y no las dan, volvían a tener el premio de una titularidad más que inmerecida.

La ausencia del ‘pichichi’ grana sobre el césped solo sirvió para comprobar lo que ya sabíamos, que el Real Murcia necesita un delantero de garantías como el comer, porque Boris está muy lejos de ser el futbolista que marque diferencias en un club dominador y porque Dani García o no juega donde tiene que jugar o tampoco está a la altura de las circunstancias.

El 1-0, como no podía ser de otra manera, despertó a un Real Murcia que había contemporizado demasiado y que necesitaba una versión más ambiciosa. Mario Sánchez, Armando y Fran se asociaron para multiplicar la creatividad del equipo y producir jugadas ofensivas. Tenía más el balón el Real Murcia, ponía también una velocidad más y por lo menos lograba que el Levante creara menos problemas. Pero a las buenas intenciones, les faltaba precisión, mejores movimientos y una buena sincronización entre los jugadores para encontrar rematadores.

Juan Fernández se mostraba entonces como el jugador más activo. Sus incursiones por la banda eran el mejor argumento para un Murcia al que sin embargo, como casi siempre, le faltaba contundencia arriba, donde Fran García y Boris, o no llegaban a tiempo, o quedaban a merced de sus marcadores o como en el caso del ex jugador del Melilla, estrellaba su remate contra un defensor local.

Pero el Atlético Levante, aunque con menos frecuencia, no dejaba de profundizar y en una de sus acciones Faraj disparó desviado a la red. Los de Mario Simón mantenían sin embargo su dominio y lo hacían con un apreciable rigor táctico y la buena disposición de sus jugadores trabajando en equipo y con buenos apoyos. Fran García volvía a rematar dentro del área pero esta vez era Picón el que detenía el balón, como haría también Serna respondiendo con acierto a una falta botada por el equipo valenciano.

Cambios que dan vida

Cuando parecía que Mario Simón aprovecharía para rehacer el plan inicial que no estaba funcionando, el balón volvió a rodar a la vez que Andrés Carrasco continuaba condenado al banquillo. Y mientras, en el terreno de juego, el Real Murcia se conformaba con ese domino mentiroso que no da para ganar a nadie en las últimas semanas.

Fue en el minuto 56 cuando Simón por fin entró en razón. Andrés Carrasco sustituía a un Boris inédito. Entraba Carrasco, jornalero del gol con experiencia y hambre para ocasiones como esta. Y en una de sus primeras acciones, cambiando su rol, asistió a Juan Fernández sin que éste pudiera definir. Pero el Murcia había tomado impulso y mejoraba a cada acción. Beni sacó un balón en la línea de gol y Toni Herrero poco después se interponía para neutralizar otra jugada de gol del Murcia.

Posteriormente entraba Ganet por un Juan Fernández que lo había dado todo y sólo tres minutos después de haber entrado el ecuatoguineano conseguía perforar la meta levantinista con un gol desde fuera del área que sorprendía a Picón y que hacia justicia a los méritos contraídos después de no haber cesado en su búsqueda del gol desde que se adelantara el Levante.

Quedaban sin embargo muchos minutos y el gol no garantizaba nada, sobre todo porque el Levante volvía a emerger y Serna se tenía que emplear a fondo para repeler un remate de Francis Moreno. Replicaba el Murcia, con el partido roto y de nuevo Pablo Ganet se acercaba al gol con Julio Gracia liderando las acometidas de un Real Murcia que se acabaron a falta de cinco minutos, cuando Fran García era expulsado al ver una segunda amarilla por protestar.

Con diez, los de Simón se vieron obligados a protegerse para salvar un punto. Con unos minutos de muchas imprecisiones, solo Peña pudo cambiar el marcador, aunque el Real Murcia consiguió asegurar un punto que no es suficiente.

Mario Simón: «Felicito a los chicos porque han hecho un trabajo tremendo»

Una semana más, el Real Murcia se quedó sin la victoria, y una semana más, Mario Simón insistió en rueda de prensa que su equipo mereció más. «El punto se queda escaso», decía a la conclusión del choque frente al Levante. Para el entrenador del Real Murcia, el encuentro estuvo «condicionado por el gol tempranero». Sin embargo, prefirió mirar la botella medio llena, destacando que «hemos tenido el mando y hemos sido los dueños del juego durante 80 minutos». «Nos ha faltado generar más ocasiones de peligro o estar más acertados», añadía.

Cuestionado por la mala imagen que ofreció el Real Murcia en los primeros 10 minutos, en los que el Atlético Levante les pasó por encima, Mario Simón se limitó a decir que «el rival también juega». «Es un buen equipo y nos ha costado ajustar la presión porque acumulan gente por dentro», continuaba, añadiendo al referirse al gol en el minuto 10 que «es difícil controlar esas situaciones».

«Me quedo con la personalidad que ha tenido el equipo. Tras el gol, en vez de venirnos abajo, hemos tenido el mando del partido. Pero no hemos estado acertados», decía, insistiendo en que «el punto se nos queda escaso».

Sin hacer ninguna autocrítica, pese a que se acumulan tres jornadas sin ganar y a que el equipo cae a mitad de la tabla, Mario Simón continuaba lamentando que «en todos los partidos hemos merecido sacar algo más». «Hoy hemos tenido algunas acciones a balón parado en los últimos minutos», recordaba, volviendo a mostrarse contento: «Felicito a los chicos porque han hecho un trabajo tremendo».

«Tres puntos de doce fuera de casa nos sabe a poco, sobre todo porque hemos hecho méritos para ganar», decía Mario Simón tras empatar a un gol con el Atlético Levante, volviendo a repetir que «hemos estado mejor en varias fases del partido».

«Todos son importantes»

Mario Simón también fue cuestionado por la suplencia de Andrés Carrasco y de Ganet. El técnico grana se limitó a señalar que «tenemos una plantilla grande y todos tienen que sentirse importantes». «Boris venía trabajando muy bien, y era una buena opción por la superficie de césped artificial y por el tipo de partido. En la lucha hombre a hombre nos podía ayudar», explicaba. Sobre la presencia de Dani García como segundo punta, dijo que «por dentro ya hizo una buena segunda parte la pasada jornada».

Fran García acabó expulsado y Mario Simón recordó que «no hay que caer en esas situaciones de protestar».