Al contrario que en otras temporadas, el UCAM Murcia CB no quiere poner nombre a sus aspiraciones. Tan solo quiere disfrutar el camino hacia ellas. Y es que, como casi siempre, el club universitario es reacio a ponerse techo. «Nuestro límite es el cielo», llegó a decir Jordan Davis. Por eso, Copay playoff, son las dos palabras que nadie quiere pronunciar en el Palacio de los Deportes. Pero que siempre van a estar suspendidas en el aire. Más aún después del brillante arranque que los de Sito Alonso han realizado este curso, siendo ya uno de los mejores de su historia en la ACB. 

El optimismo y la ilusión vuelven a estar por las nubes entre los aficionados al ver a su equipo entre los mejores tras la disputa de las primeras jornadas. El proyecto del UCAM Murcia más continuista de los últimos años está viviendo su eclosión en el tercer año ‘natural’ de Sito Alonso en la capital del Segura, quien ya es el técnico que más tiempo está al cargo del banquillo murciano en estos últimos once años consecutivos en la máxima competición. El entrenador madrileño quiso prolongar las buenas sensaciones con las que se cerró el pasado curso, marcado por el coronavirus y el silencio de los pabellones, y esa receta está funcionando a la perfección en el inicio de la competición. 

Un equipo competitivo hasta el final de los cuarenta minutos, maduro y equilibrado. Así se está mostrando este UCAM Murcia en la Liga Endesa después de contar tan solo con las novedades de Thad McFadden y Chris Czerapowicz respecto al plantel que finalizó el pasado curso. Junto al base Isaiah Taylor, el escolta se ha convertido en una de las principales y poderosas armas de esta plantilla. Junto a un James Webb que no duda en sumarse a esa dupla cuando es necesario para firmar actuaciones de máximo nivel. Jordan Davis vuelve a ser poner el incremento de revoluciones, mientras que Tomás Bellas es el cerebro y la templanza en la línea exterior. Maneras de técnico, pero sobre la pista. 

Augusto César Lima, Nemanja Radovic y Sadiel Rojas son de nuevo el corazón de este equipo, y los guardianes de la identidad que el club se ha forjado durante las últimas once temporadas en la élite. Chirs Czerapowicz permitirá al dominicano, que vuelve a ser el capitán, administrar todos sus esfuerzos al ganar peso en una posición en la que Vasileiadis siempre guarda gotas de calidad. En el juego interior Emanuel Cate buscará la consagración en su cuarta temporada dando pasos hacia adelante, mientras que Rinalds Malmanis se convertirá a su vez en el perfecto escudero en una rotación en la que querrá arañar cada vez más minutos.