No echar de menos a un jugador como Rafa de Vicente es difícil. Un jugador con temple, clase, visión en el desplazamiento en largo, calidad para recibir y dar en corto y, en definitiva, un jugador multiusos que sirve para organizar a todo un equipo. Un futbolista de los que son llamados en la jerga futbolística «el entrenador en el campo» y una delicia para la categoría.

Desde el momento de su marcha al Deportivo de La Coruña, Pedro Reverte ya sabía que tenía una difícil papeleta para arreglar el desaguisado que dejaba de Vicente en el centro del campo. La continuidad del centrocampista fue uno de los mayores contratiempos de la planificación en verano, ya que el jugador que se encontraba renovado y parecía decidido a seguir por tercera temporada en el UCAM Murcia, dio un giro inesperado en el guión con una llamada diciendo que se quería marchar al Dépor. Dicho y hecho, así fue. El malagueño dejó plantados a los universitarios para seguir prosperando en el histórico club gallego.

En sus dos temporadas en Murcia, se erigió como uno de los jugadores con más clase en el centro del campo y fue imprescindible para todos los entrenadores con los que se encontró. También para José María Salmerón, que en la pasada temporada no dudó en alabar a Rafa de Vicente en más de una ocasión y que formó junto a Tropi –antes de su grave lesión– un tándem casi perfecto que hizo estar desde el primer momento arriba al UCAM Murcia.

Hasta el momento, José María Salmerón no ha dado con la tecla del equipo. Salvo el partido contra el Real Madrid Castilla, que fue una completa exhibición de principio a fin, los universitarios solamente han conseguido jugar a ratos en los demás partidos. Ante el Linares le sobró con una mitad para conseguir la victoria, y en los demás, todo son empates o derrotas por no mantener el nivel durante los noventa minutos. El equipo no anda fino en defensa, por raro que parezca. Ha encajado siete tantos y solo ha mantenido la portería a cero en uno. En el centro del campo, la pareja Armando-Caballero parece intocabl, pero lo cierto es que están mostrando una irregularidad preocupante, y tampoco Abenza, la otra opción, parece convencer demasiado a Salmerón. En la delantera, también está sufriendo el UCAM en las últimas jornadas, donde se ha quedado a cero en las dos últimas derrotas.

El almeriense debe estar esperando a Tropi como agua de mayo, en la última fase de su recuperación. La última bala a la que aferrarse en el centro, sin un de Vicente que cada vez está adquiriendo más protagonismo en el Deportivo y que sueña con asentarse en el fútbol profesional.

Chaca: "Debemos concentrarnos hasta el pitido final"

Felipe Chacartegui, lateral izquierdo del UCAM Murcia, avisa del peligro que tiene el Alcoyano, su próximo rival, aunque no se van a dar por vencidos pese a la racha negativa. «El míster ha hecho hincapié que es un equipo bastante peligroso en casa. Ellos son un conjunto intenso y si no estamos a nuestro mejor nivel, va a ser un partido muy duro. El equipo está mentalizado. Vamos a luchar por los tres puntos hasta el final». Ha incidido en la dificultad de la nueva categoría. «Se decidirá todo por detalles. Lo que tenemos que hacer nosotros es estar concentrados hasta el pitido final. Estamos seguros de que los resultados positivos llegarán a base de trabajo diario», declaraba.