El ayuntamiento de Cartagena y la Escuela de Infantería de Marina General Albacete y Fuster han iniciado los trámites para volver a celebrar la Ruta de las Fortalezas, una carrera que se ha convertido en referente en el sureste español, en 2022. Aunque los responsables de la organización aún no pueden asegurar la fecha para la disputa de la misma, esta mañana han mantenido una reunión a la que ha acudido la alcaldesa de la ciudad, Noelia Arroyo, y el coronel Fernando Díaz.

El objetivo es mantener el planteamiento, itinerario y número de participantes previstos para la Ruta de las Fortalezas que quedó anulada en 2020, de manera que los corredores que obtuvieron dorsal este les vale para la edición 2022 en cualquiera de las pruebas en que estuvieran inscritos: general, juvenil, promocional e infantil.

Los que no puedan o no deseen participar en esta próxima edición se les dará la posibilidad de devolución del importe del dorsal, descontando una pequeña cantidad en concepto de gestión que se reservará la organización.

Así, estos dorsales devueltos se ofrecerán al público en general con el procedimiento de sorteo que viene siendo habitual en la Ruta de las Fortalezas.

Durante la reunión también se ha determinado que, dada la situación sanitaria actual, no se puede asegurar la celebración de la prueba en la fecha prevista, de manera que, si las condiciones obligasen a suspender la prueba de nuevo o a reducir el número de participantes, se realizará la devolución a quien lo solicite.

La Ruta de las Fortalezas es una prueba de unos 50 kilómetros de distancia que recorre la costa cartagenera. Entre las novedades con respecto a las diez ediciones anteriores, hay una que concierne al recorrido, eliminándose la bajada del monte Calvario y la posterior subida a San Julián, donde siempre se producían importantes atascos, siendo sustituidas por la conexión directa a través de la cresta que une ambas fortalezas. Esto supondrá el ajuste del recorrido a 50 kilómetros. El resto del recorrido no se verá afectado y, como cada año, se mantendrán dos lugares de referencia como son el Arsenal y Navantia. En lo que respecta a las alteraciones en la organización cabe resaltar la división de la salida en varios cajones diferenciados por tiempo estimado. O lo que es lo mismo, varias salidas diferentes para los corredores que acrediten que pueden realizar el recorrido en un tiempo inferior a las 6 horas, y otros dos para los que harán la prueba en más tiempo. Esta medida, que se aplica en pruebas multitudinarias, se toma para evitar frenar durante los primeros metros a los corredores más rápidos, así como para garantizar la seguridad al evitar esos tropezones y choques innecesarios. El número de plazas se amplió hasta 4.000 cuando antes eran 3.600.