Había un tiempo, no hace mucho, en el que el nerviosismo y la precipitación se apoderaba del UCAM Murcia CB durante bastantes minutos. El instinto y el corazón ganaban la partida al rigor y la serenidad. No fue el caso ayer, ni lo está siendo en este principio de temporada. Porque el conjunto universitario dio un ejemplo de paciencia y madurez ante el Valencia Basket (86-91) para conseguir su primer triunfo a domicilio del curso. Y el segundo una vez disputadas las tres primeras jornadas de la ACB.

Cerca de 33 minutos fue el tiempo que el UCAM Murcia marchó por detrás en el marcador ante uno de los equipos más poderosos de la Liga Endesa. De hecho, llegó a ir perdiendo por 17 puntos de diferencia en la primera mitad debido a un Bojan Dubljevic que hizo mucho daño a la defensa durante este tramo. Pero el UCAM no perdió los nervios en ningún momento. Fue paciente, supo esperar su momento y estaba convencido de que no lo iba a desaprovechar. Los de Sito Alonso tenían claro que había que sobrevivir, persistir e insistir. Y así fue como llegó su triunfo en la Fonteta. Cuando las fuerzas flojearon a un Valencia Basket mermado por las bajas (Prepelic, López-Arostegui, Van Rossom, Rivero y Tobey), el UCAM dio el mazazo definitivo al partido. El cuadro taronja, cargado de jóvenes talentos y con Dubljevic como máximo líder, llevó al límite de la batalla psicológica al UCAM. Pero los universitarios tenían una bala en la recámara. Supieron administrar sus fuerzas para el momento oportuno, cumplieron en sus facetas más débiles y consiguieron que los cuarenta minutos de partido fueran como ochenta para los de Peñarroya.

Porque si hace un tiempo, no hace mucho, el UCAM tenía problemas para administrar las cargas de faltas y ‘meter’ a su rival en el bonus demasiado tiempo. Ayer no fue el caso. Tampoco en este principio de temporada. Además, cuando aparecieron esos problemas, con Sadiel Rojas y Augusto Lima, con cuatro personales, aparecieron Czerapowicz y Emanuel Cate para cerrar el desenlace. El pívot rumano, al que se le echó en falta en las dos primeras jornadas, apareció en momentos clave para amarrar la victoria. Al igual que el alero, cuando dos triples suyos abrieron el último cuarto y fueron la antesala para voltear el marcador.

El UCAM tampoco se puso nervioso cuando dos de sus principales armas, McFadden y Taylor, no encontraron situaciones para anotar. De hecho, al descanso solo habían sumado cuatro puntos entre ambos. Pero tuvieron la calma y la serenidad necesaria para luego liderar al equipo en una segunda mitad donde el UCAM consiguió anotar 60 puntos en tan solo 20 minutos. Además, la guinda fue el 79% de acierto en los tiros libres, quizá el gran talón de Aquiles de esta plantilla, pero que ayer tampoco fue el caso.

El UCAM sufrió al inicio del encuentro con el repertorio de Bojan Dubljevic. El pívot del Valencia Basket hizo mucho daño a los universitarios al jugar abierto, y dos triples suyos abrieron la primera brecha en el marcador tras un parcial de salida de 7-2 (12-6). Las posesiones rápidas y el alto ritmo de juego en los primeros minutos no parecían beneficiar al UCAM, pero supo aguantar el tipo en defensa y encontrar en la pintura rival a un Augusto Lima que nutrió de puntos al cuadro murciano para mantener la igualdad en el marcador (16-10). El UCAM podría haber obtenido más puntos si llega a estar más acertado en las segundas oportunidades antes de cerrar el primer cuarto con el 20-15.

Pero los problemas se incrementaron en el inicio del segundo cuarto. El conjunto universitario siguió sufriendo en defensa, sobre todo en el ‘pick&roll’, y en ataque no encontró a sus referencias exteriores. Las vigilancias de los de Peñarroya sobre Isaiah Taylor o Thad McFadden anularon a los de Sito Alonso y eso lo aprovechó el cuadro taronja para disparar el marcador tras un parcial de 9-0 (32-17). Dubljevic volvió a aparecer con su tercer triple para dejar el marcador un doloroso 40-23 en la recta final de la primera parte, sin embargo, cuando parecía todo perdido para los universitarios, llegó la reacción por medio de Sadiel Rojas. Cinco puntos consecutivos por parte del capitán, después de un brillante ‘2+1’, impulsaron al UCAM en este tramo junto a un triple de Webb, quien ayer estuvo 35 minutos en pista a un nivel muy alto en las dos canastas, que dejó la distancia en once puntos antes de encarar el camino a los vestuarios (42-31).

Al igual que en el Palau, el descanso fue la mejor medicina para el UCAM Murcia. El conjunto regresó al parqué con las ideas más claras y dispuesto a darle la vuelta a la situación. A los cuatro minutos de este periodo, el equipo universitario se metió de lleno en el partido con un triple de Webb (48-42). Pero cuando mejor parecía estar el UCAM, llegaron dos faltas seguidas de Lima. Aunque Taylor, que comenzó a carburar, y Webb lideraron el parcial de 0-8 en este tramo, que colocó a los murcianos a tan solo una canasta de diferencia (57-55). Al UCAM tan solo le faltaba culminar la remontada y cada vez que parecía que iba a lograrlo aparecía Claver para anotar. Pero en la última posesión de este cuarto apareció Bellas para sacar la falta y acudir al tiro libre después de una entrada del base Hermannson (65-60).

Al igual que en el inicio del último cuarto ante el Coosur Betis, dos triples consecutivos de Czerapowicz fue la carta de presentación de un UCAM dispuesto a dar el golpe definitivo. En realidad, a los tres minutos ya lo había dado, cuando consiguió voltear el marcador y dar el mazazo psicológico a un ya mermado Valencia Basket (70-72). No obstante, tres triples consecutivos de Hermannson podrían haber cambiado la película al apretar el luminoso en el 80-82. Sin embargo, ahí aparecieron Cate, Bellas y la defensa para cerrar la machada (86-91).

Sito Alonso: "El carácter del equipo es lo que marca su destino"

El entrenador del UCAM Murcia, Sito Alonso, se mostró muy satisfecho por el triunfo de su equipo ayer en la pista del Valencia Basket y aseguró que se trata de «un premio» para sus jugadores por no haberse «rendido» en los mejores momentos de los locales.

«El partido tenía una dificultad increíble sobre una cosa que Valencia hace espectacular y es que tiene bajas y tiran de jóvenes y lo están haciendo francamente bien. Se están sobreponiendo a las adversidades y hemos pedido a los jugadores que jugaran cuarenta minutos para intentar aprovechar algunos momentos en los que no estuvieran tan bien o tuvieran que coger responsabilidades jugadores que no están acostumbrados», señaló.

El técnico destacó en la rueda de prensa que el alero del Valencia Víctor Claver tuvo «la batuta del partido» y que estuvo «increíble», pero resaltó que desde hace unos meses es «muy difícil» que su equipo se vaya de los partidos y valoró que su equipo no se rindió cuando el Valencia estuvo «fantástico». «Sí que he visto que los jugadores querían volver al partido. El carácter del equipo es lo que marca su destino, cómo te muevas en los momentos difíciles es lo que lo hace que seas blando, duro o muy, muy duro», dijo.