El murciano Alejandro Valverde quería ser protagonista en la séptima etapa de la Vuelta Ciclista a España. De hecho, lo estaba siendo hasta que a 42 kilómetros de la meta ha sufrido una caída estando escapado junto a Yates y Carapaz, entre otros. En una curva de la ascensión al Puerto El Collao, en la sierra de Alcoy, el veterano ciclista del Movistar ha perdido el control de la bicicleta y se ha ido por un terraplén, pasando por debajo de un guardarrail y sufriendo diversas heridas en el hombro derecho. 

Dos kilómetros antes, el ciezano José Joaquín Rojas realizó un ataque en el grupo delantero con el fin de lanzar a Valverde. La carrera ya estaba rota en varios pelotones, marchando en cabeza todos los favoritos, entre ellos el esloveno Primoz Roglic, líder de la carrera. Un kilómetro después, Rojas se ha abierto y ha dejado solo a Valverde, a quien se han unido, entre otros, Yates y Carapaz. 

El propio ciezano ha sido quien ha ayudado al campeón del mundo de 2018 a levantarse. Enseguida han llegado las asistencias médicas y el doctor de la carrera, después de examinar la clavícula derecha de Valverde, le ha dado el visto bueno para que siga en carrera, aunque sensiblemente mermado. El ciclista de 41 años, el más veterano del pelotón de una carrera que llega mañana a la Región con un final de etapa en La Manga, espera poder llegar a la meta. 

Valverde estaba en el cuarto puesto de la clasificación general, por detrás de Roglic, Enric Mas y Miguel Ángel López.