Mohamed Katir no estaba abatido tras la carrera. Sonrió cuando fue entrevistado por Televisión Española en la Zona Mixta. El muleño achacó su resultado, un diploma olímpico, a su escasa experiencia en alta competición. De hecho, solo lleva un año en la élite mundial. Es cierto que llegaba con la tercera mejor marca de los participantes en la final de 5.000 metros, pero en competiciones como unos Juegos Olímpicos no suelen ganar siempre los más veloces, sino los mejores tácticamente, la parcela donde más tiene que mejorar el murciano.

“Para mí es una locura entrar en una final olímpica con 23 años y sabemos que hacía muchos años que nadie de nuestro país se metía en ella y, encima, con expectativa de ganar una medalla. Para mí tiene todo esto un gran valor. Me voy muy feliz a mi pueblo, con un diploma olímpico porque esto no es un mundial ni un europeo, esto es lo más grande. Para mí es una locura. Me hubiera gustado pillar una medalla y con la marca que tengo, era para eso, porque es la tercera mejor del año. Pero me falta mejorar en los campeonatos, coger experiencia. Cuando adquiera un poco de experiencia en los campeonatos, no tendré rival. Tengo 23 años, no puedo quejarme”, explicó el atleta.

"El año que viene puedo dar un salto más, un salto increíble"

Katir se atrevió a aventurar que “el año que viene puedo dar un salto más, un salto increíble. Cabeza no me falta, motivación tampoco, tengo a mi familia que me apoya, a mi pueblo, a mis amigos y mi manager, que gracias a él he podido demostrar que estoy entre los mejores, porque ha logrado que pueda competir en la Diamond League y demostrar mi nivel, pero dadme un año más y ya veréis”, comentó.

El muleño agradeció todo el apoyo recibido desde la Región: "He recibido muchísimo apoyo desde mi pueblo y mi Región. La gente creía en mí, sabía que podía hacer algo muy bueno, pero aquí hay mucho nivel. No puedo decir que sean mejor que yo porque en tiempos no lo son, pero en campeonatos tienen más nivel que yo. Es mi primer año a nivel de élite, me falta un año más para dar un cambio aún más fuerte”, añadió.

Por último, lanzó un mensaje: “Si alguien tiene un sueño, que luche por él, que se puede cumplir. Hay que tener paciencia y currarlo digan lo que digan lo demás. Confiar en vuestra familia, que nunca os va a dejar y para adelante”, dijo, para explicar que su próximo reto es la final de la Diamond League en Zurich el próximo mes de septiembre y que por ello “no me puedo relajar cuando llegue a mi pueblo, seguiré trabajando”.