La carrera de Carlos Alcaraz Garfia da un salto de gigante tras conseguir ganar el Torneo de Umag, el primer título ATP 250 de su carrera. Y todo ello frente a un veteranísimo Richard Gasquet, quien sobre la tierra batida de Croacia fue testigo de la clase del joven tenista murciano, que a sus 18 años se ha quedado a tan solo 8 días de igualar el récord de Rafa Nadal como tenista español más joven en conseguir su primer título ATP.

Sí que ha conseguido convertirse en el tenista más joven en llegar a una final ATP 250 desde 2008, año en el que el japonés Nishikori lo logró en el Torneo de Delray Beach. También es, desde ayer, el jugador con menos edad en ganar el Torneo de Umag. Sin olvidar que esta era la primera final que disputaba. Máxima efectividad.

Con todo ello en juego, no le tembló el pulso al joven tenista murciano, demostrando a las primeras de cambio que no se iba a amilanar por tener enfrente al experimentado Richard Gasquet. El francés ya sabía lo que era batallar en el ranking ATP cuando Alcaraz ni siquiera había nacido, pero la pista no engaña. Y es innegable que Alcaraz, ya sea por carácter, calidad o esfuerzo (o una mezcla de todo ello), es capaz de competir cara a cara contra cualquiera.

Escala hasta el puesto 54 en el ranking ATP antes de afrontar esta semana el torneo de Kitzbühel, en Austria

La potente derecha de Gasquet, presente desde el minuto uno, fue contestada con ímpetu y físico por el tenista de El Palmar, capaz de responder con serenidad al primer juego perdido para remontar y ponerse 3-1 arriba. Venía de vencer al catalán Albert Ramos y hacer historia al convertirse en el finalista más joven del Torneo de Umag, pero Alcaraz quería más. Siempre quiere más. El murciano se sentía cómodo sobre la pista, y los problemas en su codo, aplacados con un aparatoso vendaje, parecían respetarle.

Bajo la atenta mirada del público reunido en el Goran Ivanisevic Stadium de Umag (Croacia), en especial la de Juan Carlos Ferrero, su entrenador, Alcaraz continuó jugando de tú a tú con el francés, quien vio como su servicio era roto en el séptimo juego para poner en el marcador el 5-2 a favor del tenista murciano. Con todo a favor, incluido el saque, Carlos Alcaraz demostró por qué está donde está, y con una madurez nada común en chavales de 18 años cerró el primer set en su favor a los 37 minutos de partido.

El segundo set comenzó como el primero, con Gasquet enchufado y haciéndose con el primer juego. El francés intentó meterle una marcha más al duelo, pero Alcaraz, consciente de la gloria en juego, no iba a dejarse arrastrar por la veteranía del galo. Con una rotura de saque puso el 2-1, y la misma historia se repetiría minutos después para con otro ‘break’ ampliar la ventaja hasta el 4-1.

Carlos Alcaraz, con el trofeo en Umag Anja Karabic /EFE

Con Gasquet en la lona, Alcaraz templó los nervios, esos que apenas se dejaron ver en la noche croata, y fue capaz de levantarle dos ‘break points’ al francés para ponerse 5-1 y acariciar la gloria. Esta se hizo de rogar, pues Gasquet tiró de casta para ganar el siguiente juego, pero la historia ya reservaba un lugar para Carlos Alcaraz, y con frialdad supo cerrar el duelo (6-2, 6-2) cuando apenas se había sobrepasado la hora y cuarto de encuentro. Juego, set y partido para el murciano.

«Me gustaría felicitar a Richard por el torneo que ha realizado. Crecí viéndole jugar y para mí es un auténtico honor y una experiencia increíble poder jugar contra él», expresó Carlos Alcaraz nada más coronarse campeón en Umag. Además, el murciano afirmó que «sin mi equipo sería imposible estar aquí, quiero agradecer especialmente a Juan Carlos su ayuda y el trabajo duro para conseguir el trofeo. Es algo que jamás olvidaré». Alcaraz se despidió agradeciendo el apoyo a tuda su gente durante estos días. «Este trofeo también es vuestro», concluyó.

Con esta victoria, Carlos Alcaraz se coloca con un total de 1.213 puntos en el ranking ATP, escalando hasta el puesto 54, el sexto mejor español. Apenas tendrá tiempo para recuperar energías, pues esta misma semana se cuenta con su participación en el Open 250 de Kitzbühel (Austria), en el que debutará ante el checo Jiri Vesely. Contará con un handicap añadido, pues pasará de competir al nivel del mar a hacerlo a más de 750 metros de altura.